Motocarro quedó enterrado en el techo de una casa

JORGE CUÉLLAR – EL NUEVO DÍA
Como si hubiese presentido lo que iba a suceder, Érica Bermúdez decidió salir en la tarde del lunes con sus hijos a hacer unos mandados, pero horas después le informaron que sobre el techo de su casa había caído un motocarro, luego de que al parecer, el vehículo hubiese perdido los frenos.

La mujer al llegar al sitio encontró que varios cuartos de su vivienda ubicada en la manzana T casa 1 del barrio El Bosque parte baja, estaban destruidos; el baño ya no existía, ni la habitación donde juegan sus hijos y mucho menos la alberca.

“Salí a las 5 de la tarde cuando llamaron a mi papá que vive en Cúcuta, porque no tengo celular; luego me encontraron y cuando llegó a mi casa veo este accidente. Cosas de mi Dios que salí con mis hijos, porque ellos permanecen en la habitación donde cayó una parte del motocarro”, contó.

Érica también recordó que no es la primera vez que sucede un accidente similar, aunque éste es el más duro que ha vivido, ya que en las otras ocasiones los carros quedaban con dos ruedas sobre su casa; asimismo mencionó que, ha enviado cartas para que construyan un muro de contención, pero no ha sido escuchada.

“El baño se partió; el piso de la casa quedó averiado y, lo peor, es que no es la primera vez que sucede un accidente en mi casa, ya en otras ocasiones otros carros intentaron destruir mi vivienda”, añadió.

Y aseguró que un hermano fue a hablar con el oficial que efectuó el croquis para instaurar la respectiva denuncia; Bermúdez alegó también que han transcurrido varias horas y el automotor no ha podido ser removido de la vivienda, por lo que hizo un llamado de colaboración a las autoridades.

“Necesito que me ayuden a sacar ese carro de mi casa, no quiero pasar el año nuevo con mi casita destruida, con mis dos hijos asustados por lo que sucedió”.

La mujer indicó que el hombre que transportaba escombros es un vecino conocido como Urbano Quiñones, pero que ni la familia ha hecho presencia en el lugar y que solamente han enviado niños para ver cómo esta el vehículo.

Credito
EL NUEVO DÍA

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