Una entrevista con Jorge Enrique Pizano Callejas, testigo clave de la investigación contra Odebrecht en Colombia, publicada por Noticias Uno reveló una serie de pruebas que demostrarían que el fiscal General Néstor Humberto Martínez conocía las irregularidades de los contratos de Odebrecht en Colombia desde 2015.

El ingeniero, que falleció el pasado jueves, ejerció como controller del proyecto (responsable del control financiero de la concesión) y como parte de su trabajo habría notado varias irregularidades en Ruta del Sol II.

Según la entrevista revelada por el noticiero, Pizano le mostró a Martínez, con documentos, las irregularidades de Odebrecht en el país desde mediados de 2015 pero ni Martínez, quien fungía como abogado del Grupo Aval, ni Corficolombiana o Episol, socias minoritarias de Odebrecht en la construcción del proyecto, le pusieron atención.

Entre las pruebas hay una serie de conversaciones entre Pizano y Martínez sobre el posible pago de coimas en el proyecto y contratos de papel.

En agosto de 2015, fecha en la cual se desarrollaba la conversación entre Pizano y Martínez Neira, este acababa de retirarse del superministerio en el gobierno de Juan Manuel Santos e iniciaba su campaña para ser fiscal.

“A raíz de eso se hace una reunión con el Vicepresidente Contralor del Grupo Aval donde se presentan las evidencias claras y concretas de los contratos que no habían cumplido los procedimientos de contratación charlados y, posteriormente, ellos realizan reuniones con Odebrecht, en las que no participo yo, para que les aclare estas situaciones y eso concluye con una modificación de los estatutos de la concesionaria como el consorcio constructor”, dijo Pizano en su declaración.

Añadió que aunque Néstor Humberto Martínez no hizo parte de esos encuentros, sí tenía conocimiento de lo que allí se habló. “Yo se lo informo personalmente”, aseguró Pizano y agregó que hizo lo propio con altos ejecutivos de la concesionaria que fueron designados por Corficolombiana. “Todas las reuniones están perfectamente documentadas, incluso en audios”.

Pizano Callejas dejó indicaciones de revelar la entrevista grabada el 9 de agosto de 2017 una vez saliera protegido del país o si moría, lo que sucediera primero. “Yo no hago especulaciones. Mis declaraciones siempre las hago porque tengo prueba de cada una de mis actuaciones, que las hice de acuerdo a lo ordenado por la ley”, enfatizó.

Hasta ayer se daba por hecho que Pizano falleció de un infarto mientras se encontraba en su finca de Subachoque (Cundinamarca), pero, a raíz de la muerte de su hijo Alejandro Pizano por envenenamiento con cianuro, la Fiscalía ordenó adelantar acciones para identificar las causas reales del deceso (ver recuadro).

Fiscal responde a las acusaciones

A través de un comunicado, Martínez Neira se pronunció en condición de ciudadano, más no como fiscal general, toda vez que las actuaciones denunciadas datan de la época en la que fungía como apoderado del grupo económico.

El hoy Fiscal manifiesta que tras conocer las pesquisas que Pizano preparó “de manera inmediata el doctor Sarmiento Angulo recibió de mis manos toda la investigación (…) con base en la cual los consorciados llegaron a un acuerdo por virtud del cual Odebrecht se obligó a reintegrar al Consorcio Ruta del Sol la suma de $33.000 millones de los contratos cuestionados”.

Posteriormente, Martínez señala que le fue “confiada la redacción del contrato de transacción, previa advertencia de que la empresa brasilera no reconocía que dichos pagos fueran ilícitos, al extremo que –se me dijo– habían presentado un informe de una firma de auditoría internacional en ese sentido, pero que para mantener el acuerdo de asociación se había llegado a dicho reintegro”.

Hijo de pizano murió envenado

El pasado domingo, apenas tres días después del fallecimiento de Jorge Enrique Pizano, su hijo, Alejandro Pizano Ponce de León también murió tras llegar desde Barcelona para acudir a las honras fúnebres de su padre.

La Fiscalía anunció que la muerte del joven, quien era pieza clave en el proceso, obedeció a un “envenenamiento por ingesta de cianuro”.

“Las pruebas recaudadas en la residencia de sus padres indican que la víctima habría encontrado el cianuro en una botella de agua saborizada que se hallaba en el escritorio de su padre, de la cual ingirió un sorbo”, dijo la vicefiscal General, María Paulina Riveros.

La vicefiscal dijo que personas cercanas a la familia, anunciaron que la víctima advirtió que el agua ingerida tenía mal sabor e intento expulsarla de su cuerpo sin tener éxito.

Según Riveros, minutos más tarde familiares del joven lo trasladaron a un centro asistencial por molestias estomacales, pero este llegó sin signos vitales. En ese caso, los investigadores recibieron la botella de agua para su análisis.