En foro virtual, la Comisión de la Verdad recibió de la Universidad del Tolima el informe ‘Contextos explicativos del desplazamiento forzado en el sur del Tolima y sus impactos sobre el territorio y la territorialidad’, estudio que será objeto de análisis por parte de la entidad para avanzar en el cumplimiento de la misión de buscar el esclarecimiento de los patrones y las causas del conflicto.

El documento, elaborado con el apoyo de la Consultoría para los Derechos Humanos y el Desplazamiento (Codhes), reveló las consecuencias y el impacto que dejó el conflicto armado y la violencia en sur occidente del departamento, con consecuencias que aún hoy en día sufren los habitantes de Ataco, Chaparral, Planadas y Rioblanco.

Además, se presentó un informe del impacto de la violencia en el Pueblo indígena Pijao de Ataco, realizado por Codhes y la Corporación de Desarrollo y Paz del Tolima (Tolipaz), que documenta la información de todo lo ocurrido en el marco del conflicto armado entre 1998 y 2015 con esta comunidad. Además, describe los hechos ocurridos, actores identificados e impactos que la han permeado a lo largo de la historia.

“La Comisión de la Verdad recibe estos informes con un profundo respeto, los cuales fueron trabajados con tanto esmero y dedicación hacia las víctimas, particularmente hacia las comunidades indígenas. Este es un momento sagrado, porque nos traen la determinación de comprender la verdad de lo que pasó y  nos hacen sentir la realidad de quienes padecieron y murieron en el conflicto”, afirmó el padre Francisco de Roux, presidente de la Comisión.

El estudio concluye que el desplazamiento forzado es  consecuencia de la intensidad del conflicto entre los actores armados: guerrillas (principalmente las Farc), paramilitares y fuerza pública.

Amenazas, señalamientos, reclutamiento forzado y el amplio abanico de acciones bélicas fueron los hechos asociados al conflicto que generaron el desplazamiento masivo de población, estimado en más de 100.000 víctimas que debieron huir y abandonar sus hogares.

“Estoy convencido espiritualmente de que las personas que murieron soñando que un día esto iba a acabar, están presentes con nosotros en este momento. Les estamos honrando de una manera extraordinaria. No eran guerrilleros, como los estigmatizaron; no eran personas que estorbaban, eran seres humanos de extraordinaria grandeza, cuyo valor y coraje se pone, justamente, en cada una de las personas que han hablado este día”, afirmó el padre Francisco.

El estudio analiza los impactos que afectaron los proyectos de vida individuales y colectivos de las poblaciones campesina, indígena, Lgbti, mujeres y niños, niñas y adolescentes diferencialmente, que causó la violencia y el conflicto armado durante tres décadas.

Los informes pueden ser descargados en la página www.contribucionesalaverdad.com