Diego Gómez, con el recuerdo intacto de la única estrella Pijao

ARCHIVO - EL NUEVO DÍA
El guardameta campeón con el Vinotinto y oro en 2003 está a la espera del llamado de Rafael Dudamel para trabajar en Venezuela.

Hablar con Diego Gómez sobre el Deportes Tolima es rememorar la estrella obtenida por el Vinotinto y oro en el Torneo Finalización 2003, las dos penas máximas atajadas, una a Máyer Candelo y otra a Milton Rodríguez, y levantar el trofeo que ha sido esquivo en los últimos torneos.

El guardameta, retirado de los campos profesionales hace dos años, es hincha de la ‘mechita’, pero en su corazón hay un espacio para el conjunto Pijao.


“De Tolima vivo feliz; haber estado en Ibagué y ser campeón ha sido lo mejor que me ha pasado, además, las amistades y todo lo que viví allá es un recuerdo muy lindo”, refirió el exDeportes Tolima.


Desde que estuvo en la ‘Tierra Firme’, según Gómez, ha sido su segundo equipo, luego del América; “el Tolima para mí ha sido muy grande y siempre he estado pendiente de él”.


De la hinchada tolimense recuerda su lealtad con el equipo, “a donde iba la gente siempre me saludaba, me apoyaba y para mí eso lo tengo marcado en el corazón.

“Y más con ese título que obtuvimos; las personas recuerdan mucho las dos penas máximas que atajé y es una satisfacción enorme haberle brindado esa estrella al Tolima que fue recompensada con gratitud, porque a donde salía siempre había un abrazo o una palabra de amistad”.


El retiro
En dos oportunidades Diego Gómez se alejó de las canchas de fútbol profesional, la primera ocasión fue en 2008, pero regresó en el segundo semestre de 2009; sin embargo, un año después, en 2010, colgó los guantes estando al servicio del América de Cali, jugando sus últimos cinco partidos.

"Estudié para ser entrenador de arqueros y en eso estoy; tomé la decisión de trabajar en Venezuela con Rafael Dudamel en Estudiantes de Mérida (2010), en donde estuve un año”, manifestó Gómez.


En su regreso a Cali, Diego Gómez, en 2011, quedó campeón con la Selección Prejuvenil del Valle del Cauca, con Wilmar Conde, y tuvo la posibilidad de trabajar en la Liga de Fútbol.


Además, hizo parte del conjunto escarlata como entrenador de arqueros hasta enero de 2012, “luego llegó el profesor Eduardo Lara, cambió todo y estoy por fuera del equipo. Trabajo esporádicamente en escuelas de fútbol para dar algunas charlas o trabajar con algunos muchachos, pero no hay nada concreto”.

A la espera de trabajo

El exDeportes Tolima está a la espera de un llamado de su ‘colega’ Rafael Dudamel, quien hace parte de la Selección de Venezuela Sub17.


“Estoy esperando una oferta de Venezuela con Rafael Dudamel, espero se solucione y a final de este mes estaría viajando; sería para trabajar con el equipo Yaracuyanos y de pronto tener la posibilidad de estar con la Selección Venezuela Sub17”, sostuvo Gómez.


Por el momento, el campeón Vinotinto y oro de 2003 se la pasa dictando conferencias, entrenando futuros guardametas y compartiendo con su hija María José, de dos años, así como Diego Fernando y Juan Manuel, quienes inician el camino del fútbol.


“Me tienen contento porque los acompaño a los entrenamientos y los partidos, disfrutando algo que ya se dejó a un lado y por eso les brindo el apoyo y la experiencia que se tuvo para que sigan adelante, porque no se sabe si van a llegar a ser profesionales, pero sí que hagan las cosas de la mejor manera”, concluyó.


La actualidad Pijao

Diego Gómez, además, opinó de las actuaciones del Vinotinto y oro luego del campeonato alcanzado en 2003.

“Creo que ha sido falta de más ambición de querer lograr las cosas; nosotros, en 2003, teníamos un gran equipo y teníamos mucha ambición de lograr ese objetivo y conseguir algo que marcara la historia del Tolima. Eso ahora a algunos jugadores del equipo les hace falta para lograr ese punto de más que se necesita para alcanzar la segunda estrella”, indicó.

En cuanto a la afición Pijao, Gómez resaltó: “los recuerdo con mucho cariño y espero que sigan apoyando al equipo porque sé que va a llegar a lo más alto y les va a brindar otra estrella”.

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