Un nutrido grupo de personas, entre quienes se destacan mujeres con hijos pequeños, embarazadas y familias que aseguran ser desplazadas, se tomaron un lote ubicado en Nueva Castilla, en la comuna Ocho.

El lote tiene dueño

Los habitantes del predio invadido, afirmaron en entrevista con el medio virtual ‘Noticias y Radio’, que el lote que se tomaron lleva cerca de 12 años abandonado, no estaba cercado, y que además “se ha prestado para muchas actividades”.

Por otro lado, manifestaron que no desean robarlo, sino proponerle a los dueños del lugar, que según ellos, no residen en el país, una manera de negociarlo.

“El abogado de los dueños del predio estuvo aquí y nos dijo que él no podía entregar este lote, porque supuestamente los herederos no están aquí. Ellos viven en Suiza. Pero todo este pedazo de aquí para abajo, es invasión porque era propiedad de ellos”, aseguró una mujer que hace parte del grupo que se asentó en ese lugar; quien agregó que desean establecer comunicación con los herederos del predio, para llegar a un acuerdo.

Decididos a quedarse

Las familias, quienes ya llevan un par de días de haber tomado posesión del lote, afirmaron que la Policía y el Esmad ya los desalojaron, pero que han decidido no poner resistencia de manera violenta. Pese a las intervenciones de las autoridades, ellos persisten en continuar ubicados en el lugar, pues desean contar con una vivienda digna. También aseveraron que se les advirtió que el lote va a ser cercado para evitar que continúen asentados allí.

“Aquí nos vamos a quedar; si es necesario traemos a nuestros hijos y vamos a dormir aquí. Queremos que el Alcalde haga presencia”, expresaron algunas personas presentes en la invasión. También indicaron varios de ellos que se vieron en la necesidad de recurrir a invadir el lote, pues si tienen para comer, no tienen para pagar un arriendo, y han sido desalojados de las viviendas en las que habitan por atrasarse en el pago de los alquileres.

Aumenta número de invasiones

En los últimos meses, han sido invadidos lotes en diferentes sectores de la ciudad, como Álamos, La Gaviota, Ciudadela Simón Bolívar o la urbanización La Esperanza. En todos los casos se trata de familias que aseguran no contar con otros espacios para vivir; aunque habitantes de barrios vecinos, donde se han presentado las invasiones, han asegurado que personas inescrupulosas estarían detrás para comercializar los predios. También ha habido muchas quejas por el aumento de inseguridad, según han denunciado las comunidades de los sectores mencionados.