El cardenal colombiano Darío Castrillón Hoyos contó que apenas cinco minutos después de haber terminado una reunión de todos los cardenales con el Santo Padre, conoció de su decisión. 

“Ha sido un dolor muy grande por el aprecio que le tenemos a Su Santidad Benedicto XVI. Él le ha regalado a la Iglesia la luminosidad de su inteligencia de la cual está dotado, la fidelidad a la Iglesia que siempre manifestó y un magisterio lleno de luz, claridad y precisión”. 

Monseñor Castrillón dijo que “cuando el Sumo Pontífice habla improvisando, siempre mostraba su corazón sencillo y humilde”. 

“Para todos nosotros -agregó el prelado- ha sido una tremenda sorpresa porque ninguno de nosotros sabíamos de su intención de renunciar”. 

Y concluyó que “nos da un dolor muy grande por su retiro, nos deja la alegría de un magisterio profundo”. 

A mediados de marzo próximo tendrá que organizarse un nuevo cónclave donde todos los cardenales menores de 80 años votarán para escoger un nuevo Papa. 

Por Colombia, el único cardenal papable es monseñor Rubén Salazar, presidente de la Conferencia Episcopal, pues monseñor Darío Castrillón ya sobrepasó esa edad.