“El Ministerio del Interior solicita a las autoridades adelantar las investigaciones del caso, identificar a los responsables y proceder con su respectiva judicialización”, señala un comunicado. 

Asimismo, rechazaron los actos de violencia contra de las comunidades y cabildos indígenas del país, sin desconocer las amenazas que también han surgido contra jóvenes, mujeres y líderes de organizaciones sociales. 

Incluso, el pasado jueves, cerca de 3000 indígenas de diferentes municipios del Cauca marcharon desde Mandibá hasta Santander de Quilichao en rechazo a la violencia histórica que vive este departamento. 

No en vano es preocupante la situación de los líderes sociales, pues de acuerdo con las bases de datos de la ONU, hasta mediados de abril fueron asesinados 30 líderes de víctimas, políticos, indígenas y comunitarios, además de defensores de derechos humanos, docentes, sindicalistas, funcionarios públicos y periodistas. 

Delitos como este disminuían desde el 2012, pero hasta abril de este año, fueron asesinados 9 personas más que ese mismo periodo del año anterior. También organizaciones como Somos Defensores, contabilizaron 19 homicidios solo de defensores de DD. HH. en el primer trimestre del 2015, la cifra más alta desde el 2002. 

A este hecho se suma el incremento de amenazas y panfletos contra 751 personas, firmados por grupos como ‘las Águilas Negras’, ‘los Urabeños’ y ‘los Rastrojos’. De esta cifra 14 de los amenazados son víctimas de la delegación que viajó a Cuba para participar en los diálogos de paz.