La presidenta de Brasil Dilma Rousseff nombró el jueves a los siete miembros de una Comisión de la Verdad que investigará los crímenes de la dictadura (1964-85), una iniciativa histórica en este país que suscitó las críticas de los militares de la reserva, informó la Presidencia.
La comisión funcionará por dos años con la misión de sacar a la luz hechos como la desaparición forzada de personas y violaciones de derechos humanos, entre 1946 y 1988, un período mayor que la dictadura, bajo la condición de no levantar la amnistía de 1979 que impide enjuiciar y encarcelar a los represores.
Rousseff, que fue guerrillera en la dictadura y sufrió cárcel y tortura, había sancionado en noviembre la creación de esta comisión, una medida histórica para este país que está a la zaga en comparación con otros países de la región, donde militares acusados de crímenes han sido procesados y condenados.
Credito
COLPRENSA
Comentarios