El exclusivo centro educativo al que asisten las hijas del Mandatario, Malia y Sasha, confirmó a través de su página web haber recibido “una llamada telefónica sospechosa”, haber evacuado los edificios del campus temporalmente y, tras una investigación de la Policía, haber determinado que la escuela “no corría ningún riesgo”.

Un portavoz de la Policía Metropolitana de la capital, Araz Alali, aseguró que “no hay pruebas de que la amenaza estuviera dirigida a la familia presidencial”, según  informó el diario Politico.

La hija mayor de Barack y Michelle Obama, Malia, tiene 14 años y la menor, Sasha, 11 años, una de las primogénitas más jóvenes que ha vivido en la Casa Blanca.