El ataque, en la localidad de Sumaa, en la provincia de Abyan (sur), fue efectuado el jueves por la noche contra un automóvil a bordo del cual se encontraban los miembros del grupo extremista que murieron, precisó a la AFP uno de los responsables locales que pidió el anonimato.
Otro responsable subrayó que el ataque fue contra “un emir local de Al Qaida, cuyo cuerpo fue carbonizado”.
Muy bien implantada en Yemen, la red yihadista se benefició del caos provocado por el conflicto entre el gobierno y los rebeldes hutíes para ampliar su influencia, especialmente en el sur del país.
Al Qaida es objeto de muchos ataques con drones, imputados a Estados Unidos.
También es atacada por fuerzas terrestres pertenecientes a una unidad entrenada por los Emiratos Árabes Unidos, miembro de la coalición conducida por Arabia Saudita que ayuda militarmente al poder yemení contra los rebeldes.
Al Qaida en la Península Arábica (Aqpa), que reúne a yihadistas de Yemen y de Arabia Saudita, es considerada por Washington como la rama más peligrosa de la red a nivel mundial.
El grupo yihadista Estado islámico (EI), rival de Al Qaida, también se implantó en Yemen en el marco del conflicto que afecta al país desde hace dos años.
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