la palabra "terrorismo", tiene una fuerte carga emocional, generando un estado de alerta y sensación de inseguridad en la ciudadanía, tal como se ha evidenciado en las acciones registradas contra la ciudadanía en Ibagué.

Claros y fatídicos ejemplos en el ámbito global fueron los ataques suscitados el 11 de septiembre de 2001 contra las torres gemelas, cuando la ciudad de New York fue sorprendida por la acción del terrorismo, lo cual cambió la historia en la lucha contra esta forma de violencia en el mundo; fue precisamente este evento, lo que causó una profunda transformación en esa comunidad, que permitió reflexionar sobre la capacidad de unión de las personas quienes alineadamente rechazaron este atropello contra la humanidad, generando un cerco contra futuras acciones que puedan vulnerar la vida de sus habitantes.

Ahora bien, y aterrizados al contexto regional, en lo corrido de 2012 en jurisdicción de la Metropolitana de Ibagué, especialmente la red de apoyo al terrorismo del 21 frente de las Farc al mando de alias 'Geovany', han materializado algunos actos terroristas, con la activación de artefactos explosivos, hacia objetivos muy posiblemente planificados por alias 'Donald' y 'Armando Pipas', encargados de generar actividades de presión para la exigencia de dinero a transportadores de servicio público, comerciantes y comunidad en general, eventos violentos que han dejado particulares lesionados y millonarias pérdidas materiales.

Contrario a ello, el trabajo interinstitucional desarrollado desde la Policía Metropolitana de Ibagué, ha permitido la neutralización de más de 10 pretensiones terroristas en esta zona del país, dejando como resultado la captura de personas vinculadas en actos de terrorismo, la incautación de elementos y explosivos que se utilizan en el macabro fin, siendo una cifra considerable que se podría aumentar donde la comunidad, aportara información objetiva y de forma oportuna en los momentos de criticidad, donde existe la imperiosa necesidad de actuar bajo un frente común y de unidad local.

Hago un llamado a la reflexión frente a la afectación que vienen generando hechos como los acaecidos el fin de semana anterior, donde varios de nuestros hermanos ibaguereños fueron víctimas de una acción terrorista en la Plaza de Mercado de la calle 21 y la terminal de transportes, entre ellos menores de edad y personas nobles y trabajadoras, que diariamente buscan su sustento y nunca se imaginaron que por el actuar de estos desalmados delincuentes, tuvieron en riesgo sus vidas y siendo afectados en su integridad física; pero, ¿dónde están aquellas personas que sin esperar una noticia de entrega de recompensa por parte de las autoridades, aporte una luz de información que conduzca a la captura de los responsables?, invito a la comunidad en general a cobijarnos con el manto de la solidaridad generando un cerco a la acción delincuencial y terrorista de personas dedicadas hacerle mal a nuestras familias.

Este tipo de eventos no puede generar indiferencia de los habitantes en Ibagué y el Tolima, es nuestra responsabilidad como Policía nacional y en coordinación con los organismos de seguridad del estado, adelantar todas las acciones constitucionales para lograr esclarecer los hechos y presentar ante la justicia a los responsables de tan demenciales acciones, pero, también es responsabilidad moral y ciudadana trabajar juntos en estrategias que impidan hechos similares en nuestra ciudad o en algún lugar del departamento, blindando esta región de la acción terrorista de grupos guerrilleros y de delincuencia común, que mediante el uso de terror pretenden acabar con la tranquilidad de nuestro territorio. Dios y Patria.