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Al final de la jornada del 23 de mayo, en la Comisión Séptima de la Cámara baja se aprobó la reforma a la salud, en manos del ministro de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo, tras varios meses de debate dentro de las esferas del legislativo. Así pues, el proyecto de ley será discutido en plenaria de la misma corporación, en un escenario que se muestra parcialmente dividido.
No en balde, los esfuerzos del ministro Jaramillo Martínez rindieron sus frutos. Su ‘mano negociante’ logró crear acuerdos con los diferentes partidos políticos que, durante la elaboración del articulado, incidieron críticamente en varios puntos claves del proyecto de ley.
Tal y como están las cosas, De los 139 artículos con los que entró al primer debate solo se eliminaron nueve artículos y, además, se incluyeron otras 14 proposiciones que llegarán a la plenaria de la Cámara, donde se surtirá el segundo debate de uno de los proyectos banderas de este Gobierno.
La ‘mano conciliadora’ del Ministro
Desde el inicio del debate sobre la reforma, la exministra de salud, Carolina Corcho, encontró en el legislativo apoyos importantes entre quienes se alinearon alrededor de la reforma. Tal es el caso de la representante Martha Alfonso, quien trabajó como coordinadora ponente del articulado y lo sacó adelante antes de la salida de la jefe de cartera.
No obstante, las decisiones sobre el articulado dejaron un ‘sinsabor’ entre los partidos políticos que, ante las circunstancias, fueron tomando posturas ante el Gobierno. El Partido Liberal, en cabeza de César Gaviria, quedó ‘dividido’ tras los desacatos de varios legisladores del partido en la votación del articulado, hecho que influyó en el éxito del proyecto de ley.
Lo mismo pasó con los partidos Conservador y de La U, quienes finalmente se declararon en independencia y mantuvieron una distancia prudente al Gobierno, mas no una oposición concreta.
Con la llegada del ministro Guillermo Alfonso Jaramillo, de la mano del ministro de Interior, Luis Fernando Velasco, los ‘acuerdos políticos’ con los partidos se fueron tejiendo.
“Agradecer a los periodistas, a las barras que llegaron a oír todas las exposiciones, y a los representantes de esta comisión. Puede que por una y otra razón tengamos diferencias, tengo que felicitar a Andrés Forero (Centro Democrático), así estuvimos muchos años en oposición y entendemos su trabajo. A las UTL que trabajaron incansablemente, estuve en este Congreso por 15 años y no había visto un trabajo tan formal y transparente. Lo más importante es que esperemos que lo que estamos planificando pueda ser benéfico”, apostilló Jaramillo Martínez.
Finalmente, para tramitar la reforma, hubo varias adecuaciones sobre el texto original. Para recibir el apoyo de ‘La U’, se modificaron varios artículos que dejaban en la ‘cuerda floja’ el poder de las EPS. Así las cosas, se recortaron 9 artículos que traían a colación la creación de los fondos regionales de salud.
De esta manera, el Gobierno concretó entre 12 y 14 votos en la mayoría de los artículos. Se opusieron el partido Conservador, Cambio Radical y Centro Democrático con 6 votos.
Puntos claves de la reforma
Del articulado aprobado, se establecen varios puntos clave que cambiarán el paradigma del sistema de salud actual. Los mismos, fueron eje de consensos y debates entre los partidos que, en su consolidación, fueron perfilando su postura tras la salida de la exministra Corcho.
En síntesis, el artículo 60 establece las funciones de la Entidad Administradora de los Recursos del Sistema de Salud. Con esta, será la Adres quien administre los recursos del sistema, siendo el pagador único. Podrá hacer giros directos a los prestadores de servicios de salud y proveedores de tecnologías en salud.
Del artículo 49, se conforma la transformación de las Entidades Promotoras de Salud (EPS), que pasarán a ser Gestoras de Salud y Vida. Tendrán plazo de dos años para hacer la transición. No implica su liquidación, si no un proceso de disolución.
Los artículos 53 y 54 establecen la regulación para la inspección, vigilancia y control de las ‘Gestoras de Salud y Vida’, así como de sus gastos administrativos. Y el artículo 46, se plantea regular los derechos de permanencia de los empleados públicos con derecho a carreras administrativas. Los empleados públicos con derechos de carrera administrativa o nombrados en provisionalidad de las Empresas Sociales del Estado del orden nacional y territorial, a la vigencia de la presente ley, conservarán el carácter de su vinculación hasta su incorporación como trabajadores estatales de la salud en las Instituciones de Salud del Estado (ISE).
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