Día del Tamal: famiempresas, tradición y economía del Tolima

Crédito: Helmer Parra /Nuevo Día
De acuerdo con la Alcaldía de Ibagué, se estima que se vendieron más de 40 mil tamales, las personas se agolparon en los puntos de venta, y las tamalerías resurgieron con el folclor tras más de dos años de pandemia.
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Desde muy temprano los ibaguereños se acercaron a los ocho puntos destinados por la Alcaldía Municipal para celebrar el Día del Tamal Tolimense, ese plato típico e insignia de la región que se destaca en el país por su inconfundible sabor. Y es que con el regreso del folclor este producto generó toda una reactivación económica, así pues, los tamaleros de la ciudad encontraron un impulso tras dos años difíciles.

Cientos de familias se agolparon en el Panóptico, la Plazoleta Darío Echandía, las plazas de mercado y los supermercados Mercacentro y Surtiplaza para deleitar un tradicional tamal tolimense por $8.000. 

La secretaria de Desarrollo Económico de Ibagué, Alba Lucía García, comentó: “Fueron más de 76 tamaleros distribuidos en la ciudad, las panaderías también se vincularon, y la invitación a las personas es a que apoyen nuestra gastronomía y comercio. Hoy (ayer) arranca el horario extendido 24 horas, vamos de largo”. 

El tamal tolimense se caracteriza por su sabor.

El tamal tolimense se caracteriza por su sabor.

La funcionaria acotó que en el 2021 se vendieron 22 mil tamales, año en el que tampoco hubo desfiles y había fuertes restricciones biosanitarias, por lo que se espera que este año se comercialicen el doble.

“Aquí no solo se suma a la reactivación económica sino también a la preservación de la tradición. El tamal tolimense nos identifica en Colombia y en el mundo porque es diferente, tiene unos ingredientes únicos, es una receta que ha pasado de generación en generación”, concluyó García. 

Por otro lado, la cadena de insumos del producto también se vio beneficiada, es decir, quienes producen las hojas de cachaco para su empaque y los alimentos que contiene el tamal. 

“Los invitamos a que vengan a la plaza La 28 a comer tamal. Este mes ha sido muy bueno para el comercio, nos ha permitido darle trabajo a mucha gente”, señaló Norma Vera, de la Lechonería La Ibaguereña.

Felipe Ferro, diputado del Tolima, junto a su familia.

Famiempresas y tamalerías

Un factor común entre las tamalerías es que son famiempresas que conservan los saberes de los mayores y a partir de allí se mantienen como unidades de negocio. 

Por ejemplo, la Tamalería Pijao de la etnia Pijao de la comunidad indígena Tolaima, aunque hace cinco años está constituida como empresa sus miembros han hecho tamales toda la vida. Para el Día del Tamal prepararon 600 y antes de las 9:00 a.m. de ayer ya habían vendido la mitad.

Un caso diferente es el de Arepas del Valle, que hace tamales para la temporada. Yolanda Monje, su representante, dijo: “Estamos constituidos hace más de siete años, y los tamales los consideramos un buen negocio porque es la tradición de nuestro Tolima, por eso este año estimamos vender 2.000 unidades”.

Andrés Ramírez, de la Tamalería Doña Hilda, contó que la empresa está hace más de 10 años en el mercado, tiempo durante el cual han logrado posicionar la marca, “aunque fue duro en la pandemia, pero ahora estamos resurgiendo”. 

Y agregó: “Este espacio no solamente es importante por la parte económica, sino también por el enriquecimiento cultural y gastronómico, es mantener al tamal como un producto representativo”. 

Andrés, quien es de la tercera generación de la empresa, acotó que en junio pueden vender hasta 4.000 tamales. 

Alipio Carbonel, dueño del negocio Son y Sazón. Su historia con el tamal se remonta a hace 70 años.

Alipio Carbonel, dueño del negocio Son y Sazón. Su historia con el tamal se remonta a hace 70 años. 

Mantienen la tradición

Otra es la historia de Alipio Carbonel, dueño del negocio Son y Sazón. “Esto es una auténtica tradición, mis abuelos de Coyaima hacían tamales hace 70 años, siguió mi mamá y ahora nosotros”. 

Carbonel tenía un restaurante cerca a la Universidad del Tolima pero por la pandemia lo tuvo que cerrar, “así que retomamos los tamales y son los que nos han permitido subsistir”. Dijo que espera vender mil tamales en el Día del Tamal. 

“Ayer fue el día del sombrero, hoy el del tamal (ayer), mañana el del achira, quiere decir que estamos rescatando las tradiciones gastronómicas. Aparte de sabor, el tamal es folclor y familia”, apostilló el libanense. 

Alipio Carbonel calculó que las tamalerías de Ibagué venderán más de 50 mil tamales durante todo junio.

Por su parte, Ulises Velázquez, propietario de Lechonas y Tamales del Espinal, indicó que su empresa lleva más de 30 años haciendo tamales, trabajo que inició con su abuela. 

“Este junio nos ha ido muy bien porque hay turismo, horarios flexibles y todavía nos queda una semana”, finalizó Velázquez.

 

Credito
JUAN JOSÉ AGUIRRE Z.

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