Viña de Calambeo fue fundado hace unos 18 años, cuando cinco hermanos decidieron vender una herencia familiar que tiempo después se convirtió en una urbanización más de la comuna Dos.

Se caracteriza por tener 82 viviendas, ser un lugar pequeño, fresco y de gente amable que, a través del tiempo, ha luchado por tener un desarrollo que esté a la par de las expectativas que se auguran para la calle 19 entre la avenida Octava y la Clínica del Corazón.

Tanto así, que habitantes como León Manuel Jiménez Castellanos, tesorero de la Junta de Acción Comunal, destaca que de ser posible que el municipio dé viabilidad a dicha vía, se tendría la oportunidad de legalizar y valorizar el barrio, que aún cuenta con más necesidades que fortalezas.

Pues Viña de Calambeo, pese a su estratégica ubicación y cercanía con el importante centro hospitalario, no cuenta con la pavimentación de sus calles, y los caminos que hay se han convertido en trochas de ganado y caballos.

Además, habitantes del sector mencionan que el barrio se ha vuelto inseguro pese a la cercanía que se tiene con el CAI de la calle 19 con carrera Novena.

Los problemas de la calle 19
El primer inconveniente que tiene la proyección de la doble calzada de la calle 19 es el espacio público que ocuparon los locales que están desde la avenida Guabinal hasta la Clínica del Corazón.

Según la Secretaría de Planeación, las enramadas de El Pulpo, el Carnaval del Pollo e incluso parte del parqueadero de la Clínica del Corazón no tienen licencias ni permisos respectivos para estar ahí.

“En ningún momento expedimos el concepto de la actividad versus el suelo, pero la Secretaría de Gobierno, a través de la Dirección de Espacio Público, debe vigilar esos locales”, dijo Luis Alfonso González, arquitecto de la Secretaría.

De otra parte, en dicha dependencia se informa que teniendo en cuenta el Acuerdo 009 de 2002, que reglamenta las vías de la ciudad, dichas construcciones tienen que hacer el retroceso de la línea de paramento, una vez el Municipio quiera hacer la otra calzada, y como se empieza a tocar predios ajenos, esas afectaciones se deben pagar y esto es un proceso que debe hacer la Oficina de Registro de Instrumentos Públicos.

Por esto, Olga Lucia Ríos, propietaria de los lotes arrendados para los establecimientos comerciales, explicó que se está elaborando un plan parcial para que la Alcaldía demarque por dónde iría la vía.

“Lo anterior, porque mi esposo, Álvaro Rodríguez, quien figura como el representante legal del terreno, quiere vender y saber qué necesita el Municipio para la calzada que falta”, indicó.

De otra parte, dueños de establecimientos comerciales como El Pulpo dijeron que en las condiciones de arrendamiento se les especificó que en el sector había una vía proyectada, “la que tenemos que ceder terreno de solicitarlo”, dijo Miguel Antonio Parra.  

De otra parte, el concejal Camilo Delgado dijo que si dentro de la proyección donde se está ejecutando la calzada, se determina por parte de la Administración, a través de la Secretaría de Planeación, cuál es el paramento real que existe para hacer el retroceso de las construcciones y de las edificaciones que están en la zona verde, el Municipio, con ese instrumento, puede hacer la restitución del espacio público.

Sin embargo, lo que se entraría a determinar es si esos paramentos que tienen son los mismos de cuando fueron instalados los locales.

Y se explicó: “Si en la proyección que se está haciendo de la nueva vía se determina que los locales incumplen con los paramentos definidos desde un principio, y están ocupando zona de espacio público, el Municipio no podrá pagar alguna contraprestación ni indemnización.

“Lo anterior, porque es una zona de espacio público; segundo, porque es una zona afectada del bien común y, tercero, porque prima el interés general sobre el particular”.

Es decir, esta zona tendrá que ser restituida al Municipio sin indemnización.

¿Qué se plantea desde la Dirección de Espacio Público?
El Director de Espacio Público explicó que sin conocer el tema en particular, la acción que debe hacer esa dependencia es verificar si dichos sitios cuentan con el permiso de construcción de la Curaduría Urbana.

“Sin embargo, también se debe verificar si las construcciones están dentro del espacio público o son propiedad privada.
“De igual forma, cabe la posibilidad de que en anteriores administraciones no se haya ejercido la suficiente vigilancia en espacio público sobre esas proyecciones viales.

“Sin embargo, solo se entraría a mirar si nos envían una comunicación y nos piden proceder y empezamos a abrir los procesos para la restitución del espacio público.

“Si una persona lleva 15 o 20 años invadiendo el espacio público con una construcción o una enramada, podemos ordenar la restitución, pues con esta actividad no hay caducidad”, concluyó.

¿Zona urbana o rural?
La vía a Calambeo también tiene otras irregularidades que se definen por lo desactualizado que está el Plan de Ordenamiento Territorial, y es que algunos sectores que son comerciales aparecen de estrato Cero y otros de Cinco. De igual forma, el sector es considerado como zona rural.

El concejal Delgado aseguró que esto es producto del desarrollo urbanístico de la ciudad, que se ha ido cambiando el uso del suelo de algunos sectores. Por eso hay zonas de Calambeo que aparecen como zona rural y algunos conjuntos residenciales están allí ubicados.

Caracterísicas de la Calzada
Según las características de dicha obra, los postes frente a los locales que están en el mismo sentido del CAI de la Policía serían el eje de la calzada futura. A partir de allí se cuenta 15 metros hacia la derecha y 15 hacia la izquierda.

"Esto significa que establecimientos como El Pulpo, La Santa, las canchas de tejo e incluso el CAI y parte del parqueadero de la Clínica del Corazón están ocupando parte del espacio público que se proyectó desde hace años atrás", explicó un arquitecto de la Secretaría.