El imaginario de que invadir terrenos en Melgar es fácil, es una de las razones que llevarían a decenas de familias a ocupar predios en este municipio, lo que se ha convertido en un problema para las autoridades.
Según el director de Planeación, Camilo Clavijo, en lo corrido del año se han presentando más de tres ocupaciones ilegales, en distintos sectores.
Los casos de estos tipos son tan recurrentes, que fuentes consultadas por esta redacción, aseguran que estaría operando un “cartel de invasores”, que intenta adueñarse de cuanto lote desocupado encuentra.
El Director de Planeación indicó desconocer esta hipótesis, pero sí argumentó que este tipo de invasiones es muy recurrente en la zona, pese a los esfuerzos que la Administración y la Policía hacen para frenarlas.
“Se ha identificado que muchas de las personas que se organizan no residen en Melgar”, indicó al advertir que las ocupaciones se dan en lotes privados y del Municipio por igual.
Intentos fallidos
Los casos más recientes tuvieron como epicentro el antiguo matadero y un terreno donde funcionó hasta 2012 un relleno.
El primero, propiedad del Municipio y ubicado cerca al Sumapaz, fue ocupado por más de 40 personas, que aducían no tener un lugar donde vivir, y que fueron desalojadas a las pocas horas.
Por su parte, el segundo, tuvo lugar el pasado jueves, en un terreno ubicado sobre la vía Icononzo, propiedad de un particular, que al enterarse de la situación instauró las respectivas denuncias, que llevaron a programar el desalojo para el pasado sábado.
Allí, se habían instalado unas 60 personas, y al momento de su lanzamiento, unas 15 efectuaron protestas las cuales obligaron la intervención del Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad), según dijeron a EL NUEVO DÍA en el Comando de Policía de Melgar.
Peligro para invasores
La invasión al terreno sobre la vía a Icononzo representaba una amenaza alta para los ocupantes, tanto así que el viernes fue citado un consejo de gobierno en el que se consultó al Comité de Gestión del Riesgo para analizar la situación.Dicha amenaza se deriva del uso del suelo, pues se advierte que no es apto para construir un asentamiento, entre otros factores, debido a su anterior utilización como relleno.“Además la vía requiere unos aislamientos, al igual que las dos quebradas que los bañan, lo que genera mucho peligro, y por eso se ordenó la desocupación”, concluyó el jefe de Planeación.
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