De acuerdo a los lineamientos del Ministerio y la FAO, las actividades del proyecto se desarrollarán en siete departamentos: Tolima, Córdoba, Sucre, Magdalena, Caldas, Cauca y Nariño. En estas regiones se implementarán e institucionalizarán sistemas de apoyo a la toma de decisiones en el manejo de riesgos agroclimáticos para reducir la vulnerabilidad de los sistemas de producción a la variabilidad climática.

En Colombia los severos impactos sociales, económicos y ambientales, ocasionados por la débil cultura agroclimática hacen que el sector agropecuario sea altamente vulnerable a la variabilidad climática cuyos efectos se repiten cada año con mayor severidad.

La ocurrencia más frecuente se debe a los fenómenos de ‘El Niño’ y ‘La Niña’, que generan lluvias escasas y excesivas, respectivamente, cambiando el panorama de los productores nacionales, por lo que las MTA se vuelven una apuesta y alivio para ellos.

“Se busca aconsejar a los productores para que no se afecten por el cambio climático. Mover una o dos semanas la fecha de siembra puede significar que un cultivo tenga un rendimiento sobresaliente, o evitar pérdidas que parecían inminentes; esta recomendación proviene de un pronóstico agroclimático que advierte que es altamente probable que las lluvias se retrasarán por lo menos una semana”, explicó Jorge González, coordinador nacional del proyecto MTA.

Cifra

7 departamentos del país fueron priorizados para aplicar las Mesas Técnicas Agroclimáticas.