La norma (de autoría congresional), según el ministro de la Vivienda, Germán Vargas Lleras, se convierte en una forma de estimular la construcción y la generación de empleo, pues busca establecer estímulos a los colombianos que inviertan para su segunda vivienda, aunque el funcionario alertó que “el instrumento no debe dejar rendijas que conduzcan a que colombianos le den la vuelta al dinero y se beneficien de la iniciativa, eventualmente, eludiendo el pago de impuestos”.

Por eso Vargas planteó a la Comisión III de la Cámara que las exenciones no cobijen los tributos territoriales: "Lo menos que deben hacer los que se beneficien es atender los pagos de impuesto predial en los entes territoriales, como son el impuesto de rodamiento y el impuesto predial".

La ley crearía incentivos para que pensionados o rentistas que viven fuera del país elijan el territorio nacional como segundo destino para tener otra vivienda. Precisa el proyecto que se entienden como segunda vivienda los inmuebles que pueden ser adquiridos por nacionales o extranjeros no residentes en Colombia y que eventualmente ya tengan propiedades en el país en que vivan.