Ante la Corte Constitucional, el senador del Partido de La U, Juan Lozano radicó una demanda de inconstitucionalidad del artículo 31 del Presupuesto del Sistema General de Regalías al considerar violados los artículos 1, 4, 287, 298 y 311 de la Constitución Política de Colombia.

 El artículo demandado dice:

 “Artículo 31. Aprobación de proyectos en los Fondos del Sistema General de Regalías. En desarrollo del mandato previsto en el inciso 8° del artículo 361 de la Constitución Política, los proyectos de inversión susceptibles de financiamiento por los Fondos de Desarrollo Regional y del Fondo de Ciencia, Tecnología e Innovación, para su aprobación y designación de la entidad pública ejecutora deberán contar con el voto positivo del Gobierno Nacional.  

 Así mismo y en desarrollo de lo previsto por el inciso 9° del artículo 361 de la Constitución Política, los proyectos de inversión susceptibles de financiamiento con cargo al 60% del Fondo de Compensación Regional deberán contar con el voto positivo del Gobierno Nacional.”  


El Senador argumentó en apartes de su demanda: “Contrario a lo que manda la Constitución que hace obligatorio buscar un acuerdo entre los departamentos, los municipios y el Gobierno Nacional para los proyectos de regalías, se decidió que solo aquellos proyectos con el voto favorable del Gobierno Nacional pueden acceder a fondos de regalías. Esto es un tarascazo a la descentralización, esto es quitarles una facultad que tienen los departamentos y los municipios de decidir sobre sus propios proyectos y sobre sus recursos de regalías construyendo acuerdos para lograrlo. Entonces ahora hay una cúpula de la tecnocracia del Ministerio de Hacienda que asume un voto preferente, un voto que es en la práctica un veto, ya que solo con su voto favorable se puede acceder a los recursos de regalías”, explicó el Senador.

 Además, el senador Lozano recordó que cuando se discutía el Acto Legislativo de Regalías el entonces ministro de Hacienda, Juan Carlos Echeverry, llegó al Congreso con una piedra en la que estaba grabado el mensaje de que no se centralizarían los recursos de regalías. Era claro, que el Gobierno nacional no podría disponer de estos recursos sin acuerdo con las regiones. 

“Colombia es un país de regiones, que no puede marchar solo al ritmo de lo que quieran los burócratas de Bogotá. Colombia es un país que necesita reconocer lo que pide la gente en los departamentos y en los municipios. Entonces, es contrario a la Constitución trasladarles a unos funcionarios en el escritorio en Bogotá, que muchas veces ni siquiera conocen las regiones, la potestad de decidir con voto preferente cuáles proyectos se ejecutan con los recursos de las regalías de Colombia”, puntualizó.