El ciclista Mauricio Ortega (Aguardiente Antioqueño) dominó en el ascenso al Alto de La Línea, voló en el descenso, no soltó la punta en los últimos 60 kilómetros y las fuerzas le alcanzaron para levantar los brazos y quedarse con la séptima etapa de la Vuelta a Colombia, que dejó a Jonathan Millán (Gw Shimano) como nuevo líder de la competencia.

“Muy contento por obtener este triunfo de etapa, el equipo hizo una buena labor durante la carrera, nos preparamos para llegar al certamen y estamos logrando un objetivo importante, sumando tres etapas, estamos en la pelea y falta mucha Vuelta por delante”, afirmó Ortega, quien en el 2011 también mandó en La Línea, en la sexta fracción del Clásico RCN, disputado entre Ibagué y Génova (Quindío). 

Y continuó: “La estrategia fue atacar para que los otros equipos se desesperaran, tuve una gran diferencia, supe mantenerla, al final se me acabaron un poco las fuerzas, pero el objetivo era ganar la etapa. 

“Efectué un descenso excelente, tras cruzar el Alto de La Línea, pero los últimos 10 kilómetros fueron muy duros para mí y luego de siete etapas de Vuelta a Colombia el esfuerzo fue bastante”. 

La fracción se disputó entre Manizales e Ibagué, con un trayecto de 183 kilómetros, y tuvo como protagonistas a dos corredores Pijaos, Diego Quintero (Gw Shimano), quien acompañó a Millán hasta el final de la etapa y cruzó la meta en la octava posición, a dos minutos y nueve segundos de Ortega. 

“Las cosas día a día van saliendo de la mejor manera, perdimos el liderato con Sebastián (Tamayo), pero lo recobramos con Jonathan Millán y esperamos contar con muchas fuerzas para mantener la camiseta hasta el final de la Vuelta”, sostuvo Quintero, décimo en la general a cinco minutos y 47 segundos del líder. 

Y agregó: “En el descenso del Alto de la Línea hacia Ibagué tenía que sacrificarme para ir a tope porque Ortega nos llevaba una buena distancia y es un rival directo que no se le puede dar mucha ventaja; lo importante fue obtener el liderato”. 

El segundo protagonista de la ‘Tierra Firme’ en el arribo a la Ciudad Musical fue Álvaro Gómez, cruzando la meta en la séptima posición a un minuto y 15 segundos del ganador de la fracción, y ubicándose en la general en la casilla siete, a cuatro minutos y 41 segundos del líder, Millán. 

“Fue una gran etapa, hace años venía haciendo buenos puestos en el ascenso al Alto de La Línea y gracias a Dios me consagré cruzando en la segunda posición y llegar bien en la etapa”, refirió Gómez. 

Y afirmó: “Esto es con mucho esfuerzo y sacrificio, afortunadamente las cosas se van dando de la mejor manera; hemos demostrado lo mejor cada día y aspiramos estar en la pelea. La Línea es el examen más grande para los ciclistas, los escaladores y los campeones”.

La voz del líder

Jonathan Millán se quedó con la camiseta ‘Tricolor’ de la Vuelta a Colombia para el Gw Shimano, destacando el acompañamiento y sacrificio del tolimense Diego Quintero, compañero de equipo.

“Estoy muy contento. Dedicarle este triunfo a Dios, al equipo Gw Shimano y a mi familia quienes me han apoyado. Me he preparado fuerte, al igual que el equipo, cogimos el liderato desde el tercer día con Sebastián Tamayo, he llegado cuatro veces en el tercer lugar, líder de la regularidad y hoy (sábado) tuve fuerzas para obtener el primer lugar”, sostuvo Millán.

Y continuó: “Desde el comienzo al Alto de La Línea se subió demasiado fuerte, el equipo venía muy bien y sobre el final atacó (Alex) Cano, le cogí la rueda y llegué con él hasta el final; además, conté con un apoyo muy grande de mi compañero Diego Quintero, quien se entregó a muerte para sacar la diferencia”.