Policías refuerzan a Belfast tras una noche de enfrentamientos

AFP - EL NUEVO DÍA
Más de 400 policías británicos fueron enviados en refuerzo al Ulster, tras los enfrentamientos del viernes por la noche en Belfast, en los que resultaron heridos una treintena de policías y un diputado.

Unos 600 policías adicionales habían sido ya desplegados en la provincia en los últimos días de forma preventiva debido a la celebración de la tradicional marcha organizada todos los 12 de julio en Belfast por la orden protestante de Orange, que acabó de nuevo con episidios de violencia.

Grupos de protestantes se enfrentaron a los policías que les cortaban la carretera que atraviesa el barrio católico de Ardoyne, en el norte de Belfast, prohibida por las autoridades por miedo a desbordiamientos.

Los manifestantes atacaron las fuerzas de seguridad con cócteles Molotov, palos, ladrillos, botellas, latas de cerveza, petardos e incluso con una espada. En total, 32 policías han resultado heridos.

Un diputado norirlandés, Nigel Dodds, miembro del Partido Unionista Demócrata (DUP) (probritánico, protestante y conservador), también resultó herido en la cabeza, alcanzado por un ladrillo, cuando trataba de disuadir a los manifestantes de recurrir a la violencia. Fue dado de alta del hospital en sábado por la mañana.

El jefe de la policía norirlandesa Matt Bagott calificó estos enfrentamientos de "vergonzosos". Criticó la actitud de los dirigentes de los Orangistas que llamaron a manifestarse contra la prohibición de atravesar el barrio de Ardoyne.

"La palabra adecuada no es 'responsables' sino 'inconscientes'", declaró a los periodistas.

El primer ministro norirlandés Peter Robinson, quien dirige el DUP, declaró que lo importante era ahora mantener la sangre fría.

"Estos episodios de violencia hacen daño a una causa justa y van totalmente en contra del carácter pacifista que deseaban la orden de Orange para la manifestación", subraya en un comunicado.

Las marchas protestantes se organizan tradicionalmente de abril a agosto en Irlanda del Norte. Culminan con el desfile del 12 de julio, que marca la victoria del rey protestante Guillermo III en 1690 frente a su rival católico Jacobo II. Cada año se registran incidentes.

Irlanda del Norte, una provincia británica, ha sufrido 30 años de violencia interconfesional que han dejado 3.500 muertos. Los acuerdos de paz firmados en 1998 han llevado al reparto del poder entre protestantes y católicos, pero siguen registrándose episodios de violencia esporádica.

Credito
AFP

Comentarios