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A poco más de un año de la ‘poda severa’ en el Parque Centenario, aún persisten las dudas sobre cuándo será finalmente intervenida la emblemática zona verde del Centro de la ciudad.
Desde el año 2020, este medio de comunicación ha hecho seguimiento a su integridad física como a sus espacios naturales, dejando en evidencia que desde aquel entonces a la fecha, persisten varios de sus problemas más ‘estructurales’.
A través de sus redes sociales, el exconcejal Rubén Darío Correa, hoy aspirante a la alcaldía de Ibagué, criticó la actual integridad del emblemático parque y le recordó al alcalde Andrés Hurtado parte de las discusiones del pasado.
“Hace un año fue la tragedia ambiental en el Parque Centenario con el arboricidio de cinco Samanes y la muerte de una persona por la liberación de los fustes. Desde el Concejo de Ibagué logramos demostrar que todo se debió a qué premeditadamente le querían abrir paso a la "Operación Centenario", un invento (negocio) del Alcalde Hurtado para privatizar el Parque y de paso malgastarse $27.000 millones (sic)”, precisó Correa.
Así luce actualmente una de las canchas del Parque Centenario.
Debilidades de infraestructura
Por una parte, está claro que la Concha Acústica no volverá a cumplir, de momento, su función como escenario cultural durante las festividades de mitad de año. De lo anterior, es clave recordar el acontecimiento del pasado agosto del 2021, cuando en medio de la realización del Ibagué Festival, una inundación terminó por acabar el evento y trajo a la mesa de debate nuevamente el tema de su integridad.
Hoy día, sobre la infraestructura del escenario cultural solo se detalla la herrumbre sobre sus paredes, el paulatino ‘resquebrajamiento’ de su techo, basuras y la constante presión de la melaza y el área vegetal de los árboles sobre su edificación.
También persiste la falta de intervención en la mayoría de sus adoquinados, que con el paso del tiempo, ha ido perdiendo partes de su composición a tal punto que, en algunos tramos, parte de los tradicionales senderos se encuentran expuestos.
Las paredes de la infraestructura también muestran un pronunciado deterioro.
En relación con los escenarios deportivos del Parque Centenario, sobresale que el agua producto de las lluvias, además del crecimiento constante de la vegetación, terminaron por cubrir la mitad de una de sus canchas de fútbol.
Además, un gran número de las máquinas biosaludables, se encuentran completamente desmanteladas de sus barras metálicas y accesorios adecuados para el ejercicio. Lo mismo ocurre con los bebederos de agua, a los cuales también les robaron la mitad de sus grifos y partes de su composición metálica.
Y en relación con la integridad del terraplén y sus alrededores, la infraestructura que está dispuesta sobre la calle 10 sí fue intervenida y pintada, pero debajo la realidad persiste. Son notorios los ‘huecos’ que reposan sobre las paredes de la infraestructura, los cuales eran aprovechados por algunos habitantes de calle para pernoctar con anterioridad.
La habitanza en la calle ha proliferado en el sector.
Por último, esta redacción constató que hay varios puntos de la infraestructura del Parque Centenario que presentan riesgo de colapso. Algunos de los gaviones dispuestos por el parque, parte de la vía y algunos árboles sobre la calle 10, han estado cediendo ante la falta de intervención, lo que representa un riesgo para los transeúntes.
De lo anterior, es menester recordar lo sucedido con Felipe Góngora, quien falleció en abril del 2022 producto de un árbol que cedió y le cayó encima tras una intervención adelantada entre Cortolima, la Administración municipal y la contratista.
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