El sendero, que cuenta con escalones y tiene hasta un jardín, se encuentra ubicado en la Cra 6 con calle 53, a un lado del Hospital Federico Lleras Acosta y es un paso habitual de los habitantes del sector, un atajo a pie que les permite ahorrar una distancia considerable entre los barrios.

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Sin embargo, con angustia ven como este sendero, que es una ruta importante, se encuentra en malas condiciones. EL NUEVO DÍA, estuvo allí para verificar la situación de este sendero y hablar con los habitantes del sector.  

Pudimos observar que una parte del muro de contención se cayó, y hubo también un derrumbe en la zona de los terrenos del Ibal. Los vecinos deben hacer peripecias para atravesarlo y es peligroso para adultos mayores con movilidad reducida. 

Otro tema a tener en consideración es la sensación de inseguridad de la zona, que si bien es un sendero transitado, a ciertas horas se vuelve un foco de la delincuencia, debido a que habitantes en condición de calle invadieron un sector del andén.

“Es muy fácil cortar camino, esa es la razón por la cual paso por acá. Luego que se presentó el derrumbe hemos tenido inconvenientes porque no es fácil caminar, es peligroso, pero igual tomamos el camino por la facilidad y la comodidad”, contó Ányela Jiménez, una vecina del sector.

Aseguró que después de las 5:00 p.m., ya no cruza por el sitio, a menos que esté acompañada por otra persona, como mujer, siente mucha inseguridad y no confía para transitar sola. 

Además, nos contó que ese paso es una ruta que le permite ahorrarse casi dos kilómetros de recorrido, pues de no poder pasar por allí, tiene que dar una oreja enorme para llegar a su hogar. 

Iniciativa ciudadana

La administración y los vecinos del edificio, La Reserva, que es contiguo al sendero, decidieron unirse en pos de mejorar la imagen y la transitabilidad del camino. 

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Camilo Ossa, ex personero de Ibagué y residente de la zona, contó que en su momento hicieron un jardín y un camino de escalones, pero un derrumbe ocurrido en los terrenos de la planta del Ibal acabó con el embellecimiento de la zona.

Sin embargo, sus acciones no se limitaron solo a lo estético, dijo que, “también colocaron una luminaria y una cámara que apunta al camino, además de las rondas que realiza el guarda de seguridad del edificio, quién se comunica con la Policía si ve algo raro en el sector”.

Esta iniciativa ciudadana busca cambiar un poco la percepción del lugar. Todos pusieron de su parte para darle otra cara a una zona tan importante para el barrio, pero faltan más acciones por parte de la administración local que brinde garantías de movilidad y seguridad a los habitantes.

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