En medio del dolor de sus familiares, por el rapto, violación y homicidio de la niña Danna Sofia Alzate Galvis en Chinchiná Caldas, los habitantes de este municipio enfrentan una nueva y fatal tragedia.

Durante las exequias de la pequeña, se desató una estampida, que terminó con la vida de un adulto mayor y dejó varios heridos.

En la tarde del miércoles 23 de noviembre, se desarrolló el entierro de la peque víctima de Juan Carlos López Bañol, el pasado 20 de noviembre.

Las autoridades reportaron que, en medio del funeral, al que hicieron presencia decenas de habitantes, varias personas entraron en pánico colectivo por lo que se desato una escalofriante escena de angustia en el lugar.

Los asistentes empezaron a sentirse asfixiados y, en un intento descontrolado por salir del lugar, todos al mismo tiempo, se provocó una estampida en la que algunas personas cayeron al piso y otras pasaron por encima pisoteándolas.

El terrible hecho quedó registrado en video por otras personas, quienes aseguraron que incluso al interior del cementerio hubo riñas y disparos.

Las personas heridas y desmayadas fueron trasladadas a centros asistenciales, no obstante, se conoció que una persona murió producto de la falta de oxígeno.

Se trataría de un adulto mayor identificado como Luis Alfonso Gonzales Torres, de 83 años.

Por su parte, el hospital reporto 10 pacientes ingresados por urgencia con alteración en sus estados que fueron atendidos y controlados.

Hasta el momento, las autoridades no han reportado más detalles sobre la situación y las posibles causas de las riñas y disparos que dieron a conocer algunos testigos.