El juez acogió la solicitud que en ese sentido le hizo la Fiscalía después de imputarle a Cárdenas los cargos de homicidio doloso agravado en concurso con el de determinador de soborno, los cuales le podrían representar, de ser hallado culpable, al menos 33 años de prisión. Cárdenas no aceptó los cargos.

La decisión fue adoptada durante la audiencia pública que se llevó a cabo desde las cinco de la tarde de este miércoles en el complejo judicial de Paloquemao, en el centro de Bogotá. Poco antes, el fiscal del caso, Antonio Luis González Navarro, había revelado que un testigo presencial del hecho rindió declaración bajo juramento ante la Policía Judicial y la misma Fiscalía.

El testigo, identificado como José Wilmer Ayola Lerma, de 33 años y oriundo del municipio de Codazzi, César, decidió hablar con las autoridades luego de recibir varias amenazas de muerte. Ayola Lerma contó que vio los hechos de la noche del 30 de octubre de 2010, y que terminaron con la vida de Luis Andrés Colmenares, en compañía de otra persona a quien identificó como Cristian, o "Tisón", que en la actualidad, según él, está desaparecido.

Para la Fiscalía, Carlos Cárdenas puede interferir, impedir o dirigir a testigos para dificultar las labores del ente acusador, y como prueba de ello señaló el supuesto soborno y las amenazas al testigo, con lo cual ya se viene obstruyendo la acción de la justicia. También estima peligrosa la libertad del imputado para la seguridad de la comunidad y de las víctimas. El juez acogió estos conceptos y decidió enviar a Cárdenas a la cárcel Modelo de Bogotá.