“Yo no tengo la menor duda de que los colombianos quieren la paz y estoy seguro que el pueblo colombiano estaría dispuesto a ver reintegrar y desmovilizar para siempre a quienes están en esos grupos, para recibirlos con respeto, con tal que se arrepientan y quieran integrarse a la vida en comunidad a través del respeto por los demás”, dijo el ministro. 

Resaltó durante su intervención que la desmovilización desde hace tres años hasta hoy ha vuelto a crecer, lo que es la muestra de que no se está mejor en la ilegalidad y les mandó un mensaje a quienes aún están al margen de la ley a que vivan una vida común. 

“La invitación es a que trabajen como lo hacen todos los colombianos, a madrugar y acostarse tarde para poder llevar el pan a la mesa porque regalado nada existe, a todo el mundo le toca hacer lo que tiene que hacer”. 

Se refirió también a la verdad de la que se habla por estos días con la reciente creación de la Comisión de la Verdad, asegurando que no debe existir una verdad alternativa ni hecha porque toda está documentada y es solo una. 

“La arrogancia, la persistencia en la violencia, la convicción de que las rentas criminales son la manera de vivir lo único que genera al país es frustración, dolor y una permanente voluntad del país de apoyar a las fuerzas militares para que sigan cumpliendo su deber constitucional que es darle paz a Colombia, por la razón o por la fuerza”, concluyó el jefe de la cartera de Defensa. 

‘Sobreviviendo al infierno: Las FARC desde adentro’, es el resultado de 20 testimonios de exguerrilleros de la estructura que está ahora negociando en La Habana, en el que muestran a través de su historia que la vida en la legalidad es mejor de lo que se piensa. 

Así mismo, buscan con la exposición de sus experiencias que haya una reconciliación real con todos los colombianos que fueron sus víctimas, mientras portaron las armas y uniformes del grupo guerrillero. 

Las cifras en los últimos cuatro años 

-4.743 personas se desmovilizaron 

-499 permanecieron más de 10 años en las Farc. 

-993 desmovilizados ejercieron como cabecillas 

-El 21% fueron menores de edad 

-El 24% fueron mujeres, un total de 1.148