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Razón siempre tuvo Alvaro Gómez Hurtado, ( tal vez el colombiano más ilustrado de su época, junto con Alfonso López Michelsen ) quien insistía en la necesidad de cambiar “el régimen” de la época que, a la hora de la verdad, fue el que lo “suicidó”. Hoy en día, muchas “cositas” se están presentando en Colombia. Se incita al desorden, a la violencia, al desconocimiento de la institucionalidad. Todo ello, con “el cuentico” que, hay que arrancar de raíz, lo establecido. Que, no sirve para nada. Que el país, lleva más de 200 años, “muriéndose de hambre”. Que, la concentración del poder es tal que, los automotores y las motos de la “rica clase media y media baja, colombiana” deben pagar la gasolina, a precios internacionales. Al decir de Jorge Enrique Robledo en reciente Twiter, aquí, el combustible que se consume en la nación, es apenas, el 30% importado. Luego, perfectamente, Colombia, podía soportar el costo de ése porcentaje. Adicionalmente a eso, el Gobierno Nacional, prefiere no modernizar las refinerías del país, y más bien, utilizar 8.000 millones de dólares, importando gasolina y carburantes.
Al gobierno actual, se le puede estar “enredando la piola” porque, si bien es cierto, ganaron unas elecciones (sea, como fuere) el colombiano medio, llega a un punto en que se “mama” de los desaciertos, sobre todo, en lo tocante a su “bolsillo”, al de su familia, a su bienestar en general. Indudable es que, todos los días, lanzan “regalitos” al aire, y la gente sabe que eso es meramente coyuntural y ésos fugaces “ríos de leche y miel” , no son más que “sofismas de distracción” para acallar el malestar producido por las pésimas noticias de la coetánea administración.
Adendo: Pilas !!! Se puede presentar un nuevo Alvaro Gómez Hurtado !!! Esperemos, estar equivocados…
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