Parecería que realmente el país fuera por muy buen camino y seguramente que sí, cuando es evidente que el Presidente tiene las mejores intenciones y se muestra transparente en sus decisiones… Pero, en materia de seguridad definitivamente su Ministro de Defensa no le está ayudando para nada y menos cuando se atreve a decirle a la gobernadora de Córdoba, Marta Sáenz, “imprudente” por hablar de las serias dificultades de orden público en su Departamento, según lo registró la revista Semana el domingo 14 de agosto, aduciendo que el deber del Gobernador es el de mandar mensajes de tranquilidad.  

Tal vez tenga razón, pero su acción inmediata y desde el momento que inició su labor como Ministro no puede ejecutarla con lentitud ni entregar informes que generan mucha duda después de saber que existe un infierno de intranquilidad, amenaza y muerte en una zona como Córdoba.

Leer el informe que ofrece la Gobernadora de Córdoba produce repudio no sólo por los criminales y desadaptados, sino por la poca intervención del Estado en materia de seguridad. Doloroso que se haya cedido espacios hasta el punto de permitir que una institución educativa ubicada a 15 minutos del casco urbano de Tierralta tenga a sus estudiantes sin el derecho  fundamental a disponer de la totalidad de sus docentes porque el temor les impide quedarse.

Es alarmante que en Ortega,  aquí en nuestro Departamento, donde las necesidades básicas son insatisfechas en alto porcentaje, pese a que es el tercer municipio del Tolima que más regalías  recibe,  hace 15 días se haya quemado un carrotanque.  

La educación en algunos establecimientos educativos cercanos al casco urbano de este municipio  debe ser impartida en condiciones indignas, por inseguridad, a pesar de la presencia del Ejército y porque no se dispone de las aulas requeridas . ¿Qué estará pagando esta población?

Pareciera que el ministro Rodrigo Rivera Salazar estuviese más preparado para la academia que para un cargo de este orden, además la viceministra Yaneth Gija Tovar debe estar en su cargo de estratega para la planeación de la seguridad, programando ágilmente qué se va a crear para que se le garantice la seguridad y la tranquilidad a la que se venía acostumbrando el país.

Rivera Salazar, en su informe al Congreso y en los datos que suministró a los parlamentarios, sólo admite el aumento de delitos de seguridad ciudadana en cuando al secuestro extorsivo, el hurto de vehículos y el hurto de entidades financieras, para lo demás aduce que han disminuido; cosa que no se percibe.

Por ejemplo, resulta poco creíble que las acciones subversivas hayan disminuido en un 28 por ciento y que los actos de terrorismo hayan disminuido de 226 a 199 entre el 2010 y  2011;  igualmente hay un dato que suscita incredibilidad, que en éste tiempo se ha logrado la desmovilización de mil 633 subversivos y que entre el 2003 y agosto de 2011 el total de desmovilizados de estos grupos subversivos haya llegado a 23 mil 776. Nos preguntamos entonces ¿cuántos son los alzados en armas, cuántos eran y cuántos quedan?

Me parece que el Ministro va perdiendo el año.