¿Por qué está en el Pacto Histórico?

Hace un año creamos un movimiento llamado Liberal Socialdemócratas (LSD), que buscaba un camino político para recuperar la implementación de la paz, porque el Gobierno de Iván Duque, el ‘uribismo’ y el ‘barretismo’ decidieron hacerla trizas. Ese grupo de liberales hoy estamos sumándonos a un esfuerzo formidable de cambio que ha hecho Gustavo Petro a través del Pacto Histórico. Al pueblo del Tolima le transmito un mensaje claro: el gobierno de Petro será estable y equilibrado, no se dejen engañar por el cuento de la expropiación y el castrochavismo. Los liberales creemos en la libre empresa, en la propiedad privada y la libertad.

¿Por qué dice que el ‘barretismo’ decidió hacer trizas la paz?

Lo han intentado en el Congreso. Son señores de la guerra. Aplaudieron al ministro de Defensa (Guillermo Botero) que  bombardeó a los niños, aplaudieron al siguiente ministro que le disparó a los ojos de los jóvenes en la protesta social, aplaudieron a la ministra (Karen) Abudinen que saqueó los recursos de los niños, votaron en contra de la Ley de Víctimas, de la JEP y las curules de paz, y se oponen a una reforma agraria. Esa clase política cómplice del fracaso de Duque obliga a buscar un camino para devolverle la paz y la seguridad al país.

En clara referencia a Petro, el exgobernador Óscar Barreto ha dicho que Colombia no puede elegir a un régimen de corte dictatorial que puede coartar la libertad. ¿Qué le respondería?

La dictadura más absorbente del país la ejerce el ‘barretismo’ en el Tolima, mucho más que el clan Char en el Atlántico. El ‘barretismo’ es un clan familiar que busca dos senadores, que es dueño de un sinnúmero de entidades, que influye en los órganos de control regionales, que tiene asfixiada la política. 

Esa hegemonía tiene atrapado al Tolima en el pasado: 600.000 tolimenses en pobreza y 200.000 en pobreza extrema aguantando hambre. Duque y Barreto fracasaron acá. Si los lectores de El Nuevo Día piensan que esos gobiernos han sido buenos, pregúntese si hay más empleo y seguridad, pero como las cifras son contrarias, vamos a derrotarlos marcando el Pacto Histórico.

¿El Pacto no se está desfigurando con la llegada de sectores tradicionales que han estado en la antípoda política?

Hace cinco años tuve el honor de firmar el Acuerdo de Paz a nombre del Estado colombiano para desarmar a las Farc y darle a Colombia una hoja de ruta. Como médico, mi tarea es salvar vidas y el Pacto Histórico es una coalición de centroizquierda que le apuesta a la vida. Los liberales nos sentimos cómodos y tranquilos sabiendo que al fin vamos a hacer la reforma rural integral, que vamos a lograr la renta básica para las madres cabeza de hogar, que vamos a separar la seguridad social del salario para que haya mínima pensión vital digna, que vamos a construir un futuro agroindustrial, que vamos a convertir a Colombia en una despensa mundial de alimentos, que vamos a ser una potencia en turismo.

Usted junto al senador Armando Benedetti han recibido críticas de que llegaron al Pacto Histórico dos grandes politiqueros. ¿Lo ve así?

Eso son críticas del uribismo, el senador Benedetti que ha hecho una gran labor en esta campaña, tiene una historia de vida y política diferente a la mía, pero en todo caso el uribismo está infestado de narcotráfico, de corrupción. Este gobierno no tiene autoridad moral para tratar de señalar la ola de cambios que hace el Pacto Histórico y, al contrario, lo que saben es que serán relevados del poder.

¿Pero, insisto, el Pacto no se está convirtiendo en un salpicón que comienza a ser desleal a sus principios?

Todo tolimense que le guste el salpicón, que marque el Pacto. Acá están las mujeres, los jóvenes, los estudiantes, los obreros, los sindicalistas, los liberales. Mi tarea es invitar a las dirigencias de origen liberal, a los que creen en la paz y la vida, a los que respaldan la lucha de las mujeres a decidir sobre su propio cuerpo, a los defensores de la libre empresa, a los que creen en la reforma agraria, a los que piensan que no debe haber un solo joven sin educación gratuita. A todos los invito a que acompañen votando por Petro para llegar con suficiente fuerza para ganar en la primera vuelta

¿Qué lo lleva a pensar que pueden ganar en primera vuelta?

Estamos a seis puntos de ganar en primera vuelta y yo sigo recorriendo el país recibiendo apoyo de los sectores liberales que se quieran sumar a la posibilidad de que por primera vez en la historia haya un gobierno de izquierda democrática.

Algunos analistas sostienen que a Petro le va a quedar muy difícil sumar apoyos más allá de los que tiene hoy en una eventual segunda vuelta.

Vamos a recibir apoyos de las bases del partido Liberal, lo que quedó del partido de la U y Cambio Radical, cuya fuerza era heredera de Galán, pero que después lo convirtieron en clanes como el de Char o los Barreto. No hacemos sino sumar apoyos todos los días. Le pido al pueblo del Tolima que marque el Pacto al Senado y Cámara, porque necesitamos mayorías en el Congreso para sacar a los uribistas, duquistas y barretistas. La hegemonía de los mega ricos, terratenientes y los clanes como los Barreto siguen siendo una amenaza real. 

¿A cuántas curules le apuestan en el Senado? 

Yo espero que elijamos 30 senadores. 

¿No es muy ambicioso?

No. Muy ambicioso es que eligiéramos 55, pero no podemos. Hoy los partidos tradicionales duquistas, el barretismo, el partido Conservador, el Centro Democrático, los restos de la U, suman como 70 senadores a los que hay que sacar. Y habrá otros sectores alternativos, verdes y liberales, que le apuesten a la paz, con los que vamos a ser mayorías en el nuevo Congreso para ser un gobierno tranquilo. Desde el Tolima quiero preguntarle al señor Barreto cuál es su opinión de los falsos positivos, de la compra de votos con el presupuesto público, de que dos jefes de seguridad Uribe estén condenados por narcotráfico. 

Preguntas y respuestas

Si es claro que el Pacto Histórico es Petro, ¿para qué hicieron la consulta interpartidista?

Por una razón, hace un año, con la llegada nuestra y de los sectores liberales, fuimos nosotros los que le propusimos a Gustavo Petro que la consulta presidencial era la fórmula según la cual el segundo en esa elección fuera el vicepresidente, pero pasado diez meses está claro que todos los candidatos presidenciales deben tener la libertad y la potestad de elegir una fórmula vicepresidencial, que en mi criterio muy personal, en el caso del Pacto, debe ser una mujer de origen liberal, que equilibre la fórmula y que transmita confianza a los sectores de la sociedad que no son de izquierda y que todavía tiene temores infundados sembrados por la derecha sobre el castrochavismo.

¿Le preocupa que siga hablando de reformar la JEP?

Nosotros hemos logrado evitar la destrucción de la JEP, la Comisión de la Verdad y la Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas del ataque permanente del ‘duquismo’, el ‘uribismo’ y los conservadores, incluyendo el senador Barreto. Sabe que en el Tolima hay 3.175 desaparecidos que, gracias a la Unidad, pueden ser encontrados. A eso se opuso el partido Conservador y el ‘barretismo’, que está ahíto de mermelada, pero el pueblo tolimense, que está más empobrecido e inseguro por cuenta de ese fracaso de Duque y el barretismo, va a darles una lección el 13 de marzo.

¿Cree que los cuestionamientos a la exsenadora Piedad Córdoba golpean al Pacto?

Yo nunca fui copartidario de Piedad Córdoba, pero lo que sabemos los colombianos es que mientras muchos no hacían nada para salvar a las víctimas, esa mujer se metió a la selva y salvó a decenas de vidas, jugándose la vida propia. Ahí hay un refrito para tapar el escándalo de Aída Merlano, que ha confesado la compra de votos. Eso es lo que aplaude el clan del barretismo, que, entre otras cosas, ha traído a los candidatos de Uribe y Duque, a ‘Fico’ (Gutiérrez) y (Óscar Iván) Zuluaga. Aquí los esperamos porque al que ellos escojan, el pueblo del Tolima los va a cambiar. Si cambia Tolima, cambia Colombia.

¿Qué opina de la candidatura de Rodolfo Hernández? ¿Cree que se aliará con el uribismo, como se comenta en algunos círculos?

Él va a terminar siendo el candidato del uribismo. Es un hipócrita, un estafador, un miserable que engaña a los colombianos diciendo que es el jefe anticorrupción y es el único de los candidatos que tiene imputación de cargos de la Fiscalía por corrupción. Fue destituido hace 20 años como concejal de Piedecuesta por volteo de tierras, socio del clan de los Tavera, su hijo recibió la promesa de una coima de 100 millones de dólares en una notaría, es un símbolo de la violencia. Ojalá pasara a la segunda vuelta, porque es al que más fácil derrotamos

¿Cómo ve la salud política de la Coalición Centro Esperanza?

Creo que allí ya no hay un problema político sino psiquiátrico, valdría la pena hacer un artículo que podría llamarse de cómo los egos hacen imposible la esperanza. Es increíble como se atacan entre ellos mismos y cómo llevan dos años dedicados a la mecánica, es una pena porque todos ellos son defensores de la paz, pero echaron a perder su oportunidad peleando entre ellos.

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