Obras en las que predominarán la sensación de movilidad, el diálogo con el público, la visión geométrica y la forma en que el mundo es abordado en general por la plástica traerá mañana el Museo de Arte del Tolima, en su ‘Festival de Junio’.

Para esta ocasión, llegan como anfitriones Luis Fernando Bautista, John Jairo Castro, Mario Rodríguez y Diego Céspedes, quienes en 44 ejemplares ofrecen, para explorar su labor, dos ejes fundamentales: el concepto y sus expresiones plásticas.

Lo que ellos traen se llama ‘Conceptos - Bidimensional’. ¿Y qué es? En su línea de responsabilidad está la necesidad de abordar ese debate en que se ha convertido la definición de lo que exhiben los artistas en general, las sugerencias del mismo y las interpretaciones del observador.

También se busca, a través de dos dimensiones, “construir un espacio sensible donde la contemplación, el placer, el rechazo o la formación de nuevas concepciones son posibles”, dejando al espectador que observe, interprete, rechace y goce.

Propuesta óptica

‘Viaje de movimiento y color’, del escultor constructivista, cinético y óptico Danny Esquenazi, abarca 35 obras distribuidas en Cinetismo lúdico, Impulsos cromáticos y Tributo a la naturaleza; temáticas representadas en materiales como madera, chapilla y MDF.

En ellas, acuña el Museo mediante un comunicado, convergen texturas, formas, movimientos y colores desde la visión creadora y geométrica de Esquenazi, de origen bogotano pero arquitecto de la Jerusalen Bezalel Academy y diseñador Industrial en Hadassah College.

En ella, el artista, con técnicas ópticas y de alto estudio, genera sensaciones de movilidad, para lo que usa conocimientos técnicos como el juego con luces y sombras, el contraste de colores, y el tamaño y la proporcionalidad de los objetos.

Pensamientos locales

 Luis Fernando Bautista: “Quiero mostrar cómo las prendas hacen legibles socialmente los cuerpos según las apariencias, y visualizar al ser individual que se viste con un tecnicismo influenciado por los medios y sus propios juicios de belleza”.

John Jairo Castro: “El bodegón me permite una búsqueda de sensaciones con respecto al objeto cotidiano; la búsqueda de una plástica diferente la geometría, composición, color, textura, etc.”

Mario Alexander Rodríguez: “Mi obra se alimenta de lo que me afecta como ser humano, pueden ser temas comunes y universales que podrían involucrar a cualquiera”.

Diego Céspedes: “Esa incesante ópera bufa llamada vida, habitada por personajes de extrañas estéticas, víctimas de sistemas perversos y excluyentes, con elementos sarcásticos y desconcertantes”.