*Tatiana es una mujer de 50 años y una vez la empresa en la que trabaja le consignó al fondo de cesantías lo que le corresponde, ella realizó la solicitud de retiro parcial tal y como lo permite la ley. 

Sin embargo, en el caso de *Tatiana, el dinero no estaba destinado precisamente a las reformas de su casa propia, sino que por el contrario el dinero lo usó para apoyar a sus hijos en un negocio de comidas rápidas. 

Como *Tatiana miles de colombianos retiran año a año sus cesantías, no solo con el fin de pagar o hacer abonos extra cuando han comprado vivienda, sino que muchas veces utilizan este dinero para pagar deudas, invertir en un negocio y, en algunas ocasiones, hasta para irse de vacaciones con la familia. 

Sin embargo, esas cifras no se tienen en el radar de Asofondos, el gremio que agrupa a Colfondos, Porvenir, Protección y Skandia.

Oficialmente, la entidad reveló que en 2022, además de la terminación de contrato, que representó cerca de 36,8 % de los retiros de cesantías con $2,9 billones, la compra de vivienda fue la causal que más motivó el retiro de fondos. Esta cifra llegó a $2,12 billones, mientras que otros $2 billones se destinaron a la mejora o liberación de deuda de vivienda. 

Adicionalmente, salieron $0,58 billones para educación, casi 7,4 % de los retiros del año, que en todo 2022 sumaron $7 billones.

De igual manera, la Superintendencia Financiera presentó los resultados de las contribuciones. La cifra llegó a $11,7 billones, lo que representó un incremento de 17,1 % si se compara con el 2022.

Además, al revisar el monto por regímenes, 77,2 % de los pagos ($9,08 billones) fueron realizados a través de las administradoras privadas (AFP) y el 22,8 % restante ($2,68 billones) a través del Fondo Nacional del Ahorro.

Adicionalmente, el total de afiliados a cesantías se incrementó a 11,4 millones de trabajadores, de los cuales 6,8 millones son hombres y 4,5 millones son mujeres. La distribución geográfica mostró más trabajadores con la prestación social en Bogotá (34,1 %), Antioquia (17,7 %) y Valle del Cauca        (9,2 %).

Durante el año pasado, los afiliados a fondos privados retiraron $7,89 billones de cesantías, la cifra se incrementó     12,7 % y la principal causa fue la terminación del contrato laboral, siendo 36,8 % del total de los retiros, seguido por la compra de vivienda, que tuvo     26,8 %, y la mejora de vivienda, con 26,3 %.

Al respecto, expertos explican la importancia de dar un buen uso a estos recursos cuando se retiran. Por ello hacen unas recomendaciones sobre cómo invertir el dinero de las cesantías, con el fin de generar más rentabilidad, ya que esto podría convertirse en un soporte económico en el momento en que el trabajador se quede sin empleo. 

Rentabilidad de la educación

Ricardo Rodríguez García, profesor de la especialización y maestría en Finanzas de la Escuela de Negocios de la Universidad Tecnológica de Bolívar, UTB, explica que “lo primero que se debe saber es que, de acuerdo con la Circular N°11 del 10 de febrero de 2023 de la Superintendencia Financiera de Colombia, la utilidad de las cesantías entre enero de 2021 y enero de 2023 fue de solo el 1,47 %, por lo tanto, resulta más conveniente invertir este dinero en lugar de dejarlo en el fondo. Esto teniendo en cuenta que la inflación supera el 13 % y que los colombianos estamos perdiendo nuestra capacidad adquisitiva”. 

Por tanto, dice Rodríguez, invertir en educación superior es una decisión trascendental porque mejora el futuro financiero de las personas, las posibilidades de contratación laboral, permite mejorar la calidad de vida propia y del entorno, y además no tiene fecha de caducidad. 

Además, “comprar un apartamento para venderlo genera rentabilidad circunstancial y temporal. En cambio, la educación no es una inversión especulativa que, además, genera competitividad”, afirmó el profesor de la UTB.

Por su parte, en cuanto al retorno sobre la inversión, ROI, Roger Cabarcas, director financiero de la Universidad Tecnológica de Bolívar, afirma que “un profesional que recibe en promedio un salario mensual de $2 millones y que invirtió en educación superior una suma aproximada de $96 millones, recuperará su inversión en aproximadamente 4,5 años, en caso de que el egresado empiece a laborar a partir del segundo año como profesional.

Asimismo, la educación superior genera, aproximadamente, un ROI del 27 % anual, en un escenario de proyección de 10 años.

Y luego del cuarto año, todos los ingresos que el profesional reciba serán utilidades económicas que le permitirán constituir su patrimonio.

Finca raíz y la compra de vivienda

El profesor Rodríguez García asegura que de acuerdo con Tyba, si el 33 % de los colombianos tuvieran un capital disponible para invertir, lo pondrían a trabajar en finca raíz, sin embargo, “en Colombia el promedio de la utilidad de esta inversión se encuentra alrededor del 7 %, el cual está por debajo de la rentabilidad de la educación”.

Además, con el aumento de la inflación y las tasas de interés, los créditos hipotecarios y de leasing habitacional se han encarecido, al igual que los materiales para la construcción de vivienda, cuya tendencia puede seguir a largo plazo de acuerdo con los expertos.

Por esto, invertir el dinero de las cesantías en educación sigue siendo la mejor opción para que las personas generen más ganancias y mejoren su futuro.

Fomentar el ahorro 

Juliana Morad Acero, directora del departamento de Derecho Laboral de la Universidad Javeriana, explica que es importante tener en cuenta que las cesantías tienen una regulación especial y no se pueden retirar por cualquier razón, ya que solo cuando existen algunas causales taxativas señaladas en la ley o cuando se termina la relación laboral, es decir, cuando queda cesante.

Adicionalmente, es una manera de fomentar la cultura de ahorro que tiene un impacto económico agregado en el país.

Finalmente, asegura Morad Acero, con el dinero ahorrado en las cesantías, además de brindar una protección cuando quede sin trabajo, hay un mecanismo de protección al cesante que permite que esta estas cesantías se conviertan junto a un subsidio estatal en un pago periódico, si se opta por el mecanismo de protección, durante el tiempo que el trabajador quede sin trabajo.

En cifras 

1. Los afiliados a las cuatro administradoras de fondos de cesantías afiliadas a Asofondos (Porvenir, Protección, Colfondos y Skandia) utilizaron 7,9 billones de pesos de sus ahorros en 2022, lo que representa un aumento de 12,7 % con respecto al año pasado.

2. Como consecuencia de la terminación de contrato, los trabajadores retiraron más de $2,9 billones, lo que representa, según Asofondos, un 36,8 % de los retiros totales que, comparados con el 2021, aumentaron en 19,5 %.

3. Los trabajadores afiliados retiraron $2,12 billones para la compra de vivienda y $2,07 billones para mejora o liberación de deuda de vivienda, lo cual representó aproximadamente un 53 % dentro de los retiros totales.

4. Para la educación, los afiliados retiraron $0,58 billones, lo que representó el 7,4 % de los retiros. “Esto implica un aumento de 8,5 % en el valor de los retiros respecto al año inmediatamente anterior”, señaló Santiago Montenegro Trujillo, presidente de Asofondos.

Dato

Los afiliados a los fondos privados de cesantías llegaron a 9,3 millones de trabajadores con corte a diciembre de 2022.