Un total 188 pequeños rumiantes fueron entregados en 45 módulos a familias vulnerables de la zona rural ibaguereña para que desarrollen sus actividades económica en torno al potencial de estos animales.

Así mismo, por la capacitación y buenas prácticas en diferentes comunidades campesinas se hizo entrega de 10 nuevos integrantes de la emergente ganadería.

“Es un programa que tiene varios objetivos, entre los que podemos destacar el fortalecimiento de los procesos de reconciliación y resocialización, brindar seguridad alimentaria y entregar un proyecto productivo amigable con el ambiente y la variabilidad climática”, explicó Andrea Villa Salazar, profesional universitaria, supervisora del Programa de Ganadería Ovina.

La iniciativa otorgó un módulo de cuatro ovejas, con hembras inseminadas y la rotación de un macho de alta genética entre los beneficiarios de cada vereda, también contempló la capacitación y formación de estudiantes de la Institución Educativa Técnica Agropecuaria Mariano Melendro.

“Por su ubicación estratégica en el Cañón del Combeima, le estamos presentando a las nuevas generaciones de esta localidad una alternativa productiva ganadera y sus múltiples beneficios”, destacó Villa.

Desde la Secretaría de Desarrollo Rural y Medio Ambiente de Ibagué se quiere dinamizar la ganadería ovino - caprina, pues los corderos se reproducen mucho más rápido que los bovinos, hay un menor impacto sobre la topografía, consumen diferentes alternativas forrajeras y requieren de una menor inversión en mano de obra para su producción ganadera, lo que se convierte en una alternativa de sostenibilidad y desarrollo para la zona rural de la ciudad.