Las lluvias han primado en lo corrido del año, sin embargo, la estruendosa tormenta que se registró el jueves en la noche desencadenó varias emergencias en la ciudad que, aunque no pasaron a mayores, afectaron a cientos de familias.

Y pone a muchos a pensar qué podría pasar en los días que están por venir, sobretodo cuando el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales, Ideam, anunció que el fenómeno de La Niña continúa y podría extenderse hasta marzo. Sin olvidar que abril y mayo se caracterizan por días invernales.

El colapso de las redes de alcantarillado en diferentes puntos de la ciudad fue el ‘común denominador’. Barrios como Bello Horizonte, Piedrapintada; Séptima y Octava etapa del Jordán, Urbanización La Esperanza, Boyacá, Bello Horizonte, los conjuntos residenciales Cámbulos y Arboleda del Campestre. 

Durante la noche, las calles de los lugares en mención parecían ríos en los que muchas personas luchaban por avanzar en sus vehículos, otros buscaban escampadero y en las viviendas, la escoba, el trapeador y los baldes se volvieron aliados.

Heriberto Rojas, residente del barrio Bello Horizonte, comentó que la 19 sur no tiene conexión de aguas lluvias y la 125 que está cerca a la entrada a Comfenalco tiene una red de alcantarillado insuficiente, por lo que se volvió recurrente que se inunden.

“Ya acá la gente no llama a los bomberos, sino que empiezan a sacar agua y esperar a que se normalice la situación, lo preocupante es que el colegio que queda por acá, siempre se inunda feo y el lunes que los estudiantes regresen empiezan a padecer con esas lluvias que a veces ni clases los deja ver porque el agua sube más de 23 centímetros” dijo Rojas.

Según el reporte entregado por el comandante del Cuerpo Oficial de Bomberos, capitán Rafael Rico, se brindó apoyo en diferentes zonas, además se hizo inspección de los canales donde no hubo desbordamientos, pese a las altas precipitaciones. 

“Hicimos monitoreo por el río Combeima, en la zona ribereña al afluente, sin ninguna novedad; así como una revisión al canal de Mirolindo donde no se dieron situaciones graves, tampoco hubo desbordamiento del Combeima en el Cañón”, añadió.

Es de recordar que antes del aguacero de la noche, en la tarde del jueves también llovió de manera monumental y el río Alvarado se desbordó, lo que afectó diversas residencias de la comuna siete y se generaron daños en muros de contención y en el puente que comunica con la granja Huevos Oro. 

Se llevó un gran susto 

Con ocasión del aguacero, cayó un árbol por la avenida Guabinal con calle 34, lo que afectó la parte delantera de un automóvil, sin alcanzar a afectar la cabina del conductor. Por lo que después de intervenir el elemento natural se restableció la movilidad.

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