¡Se les rebotó el machismo!

Carmen Inés Cruz Betancourt

“Es un producto fácil de vender… por su condición de mujer”, afirmó en su emocionado discurso (y está grabado), el tristemente famoso ‘refuerzo’ que llegó a la campaña de la candidata conservadora a la Gobernación del Tolima.
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Y, sobre otra aspirante al cargo, la esposa del exrepresentante a la Cámara Jaime Yépes, quien pretendiendo adularla afirmó que: “ella cuenta con el conocimiento y él con la experiencia”. 

Una y otra son expresiones que revelan el machismo que los asiste. El primero definitivamente ‘cosifica’ a la candidata y la asimila a un producto comercial que puede vender con publicidad; el segundo deja claro que es la presencia masculina la que da garantía, porque acaso no confía en ella. 

En ambos casos, hacen explícito su irrespeto a las candidatas y, de algún modo, sugieren que detrás de ellas estarán hombres que ‘se las saben todas’ y así pretenden tranquilizar a quienes les inquiete que por el hecho de ser mujeres no sean idóneas para el exigente cargo al que se postulan. ¿Acaso pretenden ser los mandantes, jefes, caciques, que gobernarán “en cuerpo ajeno”? 

No conozco el talante de las candidatas pero, en todo caso, con aquellas expresiones las maltratan. Son posturas irrespetuosas hacia las mujeres y no es en esos términos como se avanza en equidad de género, por el contrario, solo afirman la capacidad de manipulación de los “machos” que utilizan a las mujeres para conservar su hegemonía. ¿Acaso apoyan el nombre de una mujer en forma oportunista, porque está de moda y como estrategia para capturar el voto femenino? 

Pero que sean personajes como ellos y sus aliados quienes las califican y ofrecen su experiencia como respaldo a las candidatas, es precisamente lo que genera desconfianza, porque es muy claro que desde las altas posiciones que por tanto tiempo ellos han tenido, cuanto han hecho y dejado de hacer por el Tolima, ha determinado que se profundice la politiquería que ha conllevado creciente corrupción, pobreza, desempleo, violencia, atraso, y desesperanza, a pesar de los importantes recursos con que cuenta la región. Y se agrega la vergüenza que sentimos porque uno de ellos contribuyó a privar al país de tener en la Presidencia de la República un personaje que hubiera podido aportar al cambio que requiere Colombia, como lo era Luis Carlos Galán. 

Surgen entonces algunas preguntas: ¿Acaso nos afecta un Alzheimer colectivo que nos hace olvidar el daño causado por  aquellos personajes y los clanes politiqueros aliados? ¿Olvidamos que, acudiendo a cualquier tipo de alianzas, son ellos y sus elegidos para asumir el poder, quienes han fortalecido el modelo politiquero que alimenta su apetito burocrático y sus negocios personales y así el Departamento continúe rodando por el despeñadero que nos lleva al abismo?. Y ¿son tan inocentes los votantes que se tragan el cuento de que, los mismos de siempre harán cosas mejores escondidos detrás del rostro de mujeres a quienes buscarán subordinar porque les deben el triunfo? 

Ojalá surjan aspirantes independientes de los clanes politiqueros que han manejado al Tolima y han propiciado el enorme rezago que padecemos. Se requieren hombres y mujeres genuinamente comprometidos con la región, que puedan conducirnos hacia un mejor futuro y, también, es imperativo que los tolimenses despertemos del marasmo que nos mantiene votando mal o alejados de las urnas, porque solo si votamos bien y ejercemos una ciudadanía activa podremos salir adelante.

 

CARMEN INÉS CRUZ

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