Por la industria del turismo

Una vez más terminaron su paso por el Tolima San Juan y San Pedro. Con ellos se van -hasta el próximo año- las carrozas, las comparsas, los matachines, las reinas y también los miles de colombianos provenientes de otras regiones del país, que con motivo de las tradicionales fiestas del folclor, se pegaron la rodadita hasta nuestra tierra para disfrutar de alegres momentos.

Una vez más terminaron su paso por el Tolima San Juan y San Pedro. Con ellos se van -hasta el próximo año- las carrozas, las comparsas, los matachines, las reinas y también los miles de colombianos provenientes de otras regiones del país, que con motivo de las tradicionales fiestas del folclor, se pegaron la rodadita hasta nuestra tierra para disfrutar de alegres momentos amenizados por el aguardiente, la lechona, los tablados y todo el jolgorio popular.

Qué triste que se vayan. Especialmente los turistas. Pero más triste es reflexionar al respecto y caer en cuenta de que a pesar de que las festividades de mitad de año atraigan tantos visitantes, no existan razones suficientes para que las gentes que viven fuera del Tolima o de Colombia en cualquier otra época del año se animen a venir a nuestro territorio a ejercer la actividad turística. Me perdonarán quienes aseguran que nuestro departamento es turístico, pero en honor a la verdad, creo que a pesar de contar con recursos naturales invaluables, paisajes preciosos, variedad de climas y una ubicación geográfica envidiable, en toda nuestra historia no se ha hecho algún esfuerzo apreciable por lograr que el Tolima y sus municipios se tornen interesantes para los de afuera; sin el ánimo de herir susceptibilidades, considero que necesitamos mucho más que la represa en Prado, las miles de piscinas en Melgar o el cañón del Combeima en Ibagué.

Ejemplos exitosos saltan a la vista. En el ámbito nacional, regiones como la del Eje Cafetero o Santander se fortalecieron a través de megaproyectos turísticos, que, sin lugar a dudas, dinamizaron su economía en forma importante. Sus parques del Café y del Chicamocha, respectivamente, reciben cerca de medio millón de visitantes por año y se han ubicado dentro de los destinos preferidos por turistas nacionales y extranjeros. En la costa Atlántica, la industria del turismo es aprovechada por decenas de miles de personas que viven exclusivamente de los cachacos que, cuando podemos, vamos a pasar allí nuestras vacaciones.

En cuanto a lo internacional, muchas ciudades del mundo aprovechan el turismo de una forma brillante: la intersección vial conocida como el Times Square, en New York (EE.UU.), recibe 35 millones de turistas por año, que van a ver cientos de pantallas luminosas con publicidad comercial; en Paris, la torre Eiffel atrae a cerca de 25 mil visitantes por día; y en Roma, el Coliseo es uno de los atractivos turísticos preferidos por millones de visitantes. Todos los anteriores ejemplos explican cómo el turismo a gran escala puede ser una opción de desarrollo sostenible, que activa todo el sector de servicios de la economía en un territorio.

Entonces ¿por qué no pensar en dar un viraje a la vocación del Tolima y apuntarle a la industria del turismo? ¿No sería una alternativa perfecta para afrontar la problemática de desempleo, la carencia de empresas industriales en nuestra región y los estragos que los tratados de Libre Comercio están causando en nuestra tradicional vocación agrícola? Creo que sí. Inclusive propongo que en nuestra capital empecemos por construir cuando menos una atracción turística de gran envergadura, para ofrecer a nuestros visitantes muchas más opciones que almorzar vía al nevado o dar una vuelta en Multicentro.

¡Qué tal un gran parque de diversiones al mejor estilo de los de Orlando en los Estados Unidos! O quizá, como lo sueña un amigo, construir un tren turístico de alta montaña que parta de Ibagué y luego atraviese los municipios de la cordillera al norte del Tolima. Tal vez haya muchas mejores propuestas, lo importante sería iniciar definitivamente un proceso que nos permita convertir a Ibagué y el Tolima en importantes y atractivos destinos turísticos de Colombia y el mundo.

Credito
CESAR PICÓN

Comentarios