Nueve de cada diez tenderos aseguran que sus ventas se afectaron por causa del “impuesto saludable” y del etiquetado de los productos ultraprocesados, medidas que entraron en vigencia el año pasado. Así lo revela el informe trimestral del Índice de Confianza del Tendero (ICT) que elabora la firma Ditcher & Neira, divulgado por el diario económico La República.
Los impactos más altos han sido en las gaseosas (con una disminución en las ventas de 57%), papas, chitos y snacks (53%), dulces y chocolates (39%) y embutidos (33%). Sin embargo, un experto abogado tributarista consultado por La República sostuvo que la experiencia en otros países señala que las ventas de las gaseosas se recuperan tiempo después, debido a que las personas no encuentran alternativas económicas para sustituirlas.
El impuesto saludable y la inclusión de sellos en los productos con alto contenido de azúcar, sodio y grasas saturadas, son medidas que buscan que los colombianos encuentren alternativas nutritivas para la alimentación familiar.
De acuerdo con la FAO (2020), el aumento del consumo de alimentos ultraprocesados está relacionado con el sobrepeso y la obesidad, que son una forma de malnutrición. Además, de acuerdo con un estudio publicado en The Lancet, la obesidad afecta a una de cada ocho personas en el mundo, y entre 1990 y 2022 la obesidad infantil y adolescente se ha multiplicado por cuatro. La obesidad y el sobrepeso son causantes de enfermedades no transmisibles como diabetes tipo 2, enfermedad coronaria, hipertensión, hiperlipidemia y derrame cerebral.
Los organismos internacionales de salud recomiendan que además del etiquetado frontal en los alimentos ultraprocesados y de los impuestos saludables se deben implementar otras acciones, como el fomento de hábitos saludables (dieta balanceada, ejercicio), regulación sobre la venta de productos ricos en grasas y azúcares en las escuelas, servicios de prevención y control de la obesidad, y normatividad sobre la actividad física en los colegios.
El impacto de los impuestos saludables y del etiquetado en la salud de los colombianos solo se conocerá en el largo plazo. Así mismo, en las ventas de las tiendas, pues hay más de 500.000 tenderos en Colombia; es decir, que igual número de familias derivan sus ingresos de estos pequeños negocios.
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