El cadáver de uno de los mayores depredadores sexuales y asesinos en serie de la historia, fue sometido finalmente a la cremación tras dos meses de estar reposando en una sala de la institución sin que nadie fuera a reclamarlo. Ya en un acto de resignación, la administración tuvo que patrocinar la ceremonia ya que nadie más quiso hacerse cargo. 

Y su destino no cambió para este último momento, pues en las imágenes que fueron captadas por algunas personas que se encontraban en el lugar, se percibe la soledad y la ausencia de dolientes a quienes le importaran darle el último adiós a este hombre que le arrebató la vida a aproximadamente 200 niños confirmados y algunos cuantos que posiblemente no han sido registrados en las listas de víctimas. 

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La noticia de su muerte, recibida con alivio y perturbación, desencadenó trámites legales y disputas familiares respecto al destino de sus restos mortales. Pese a la petición de sepultura, la presión familiar, canalizada a través de una tutela, determinó que el cuerpo fuera entregado para su cremación.

La larga estadía del cuerpo en este lugar despertó varios debates en la sociedad sobre la manera en la que se deberían gestionar las exequias de este tipo de personas y así evitar las complicaciones que se presentaron con este cadáver.  Además: Mujer ataca brutalmente a su exnovio intentando arrancarle los testículos con las uñas

La familia, sintiéndose injustamente obstaculizada, interpuso una acción de tutela que recientemente fue fallada a su favor. El proceso crematorio, financiado por el alcalde de Valledupar, Mello Castro, se llevó a cabo en el Parque Cementerio Jardines del Recuerdo, con la presencia de la defensa de Garavito, el Defensor del Pueblo, y la delegada de asuntos penitenciarios, liderando el proceso de entrega y cremación.