Asimismo, a causa de los fuertes movimientos de tierra, la habitación donde viven dos menores de edad, nietas de Mora, registraba un alto riesgo de caer. En ese sentido, tal espacio de la casa fue derrumbado y nuevamente construido por hombres del Ejército Nacional en compañía de su programa Fe en Colombia.

“Muchas gracias al Ejército Nacional y al programa Fe en Colombia por ayudarnos, nunca habíamos recibido estas ayudas, la verdad no teníamos el dinero para poder asegurar el terreno, pero después del deslizamiento que tuvimos, fue una bendición, porque todos estos muchachos nos ayudaron a reorganizar nuestra casita”, expresó Marisol Mora, afectada por la ola invernal.

Por su parte, el mayor Ismael Enrique Mendoza Cáceres, comandante del Batallón de Apoyo de Acción Integral N.°5, ratificó el compromiso de los uniformados por trabajar con y para las comunidades que más lo necesitan.
“Siempre nos encontramos prestos para ayudar y favorecer a quienes  más lo necesitan; eso somos para el pueblo colombiano, un Ejército presto a construir el tejido  social y a generar una vida íntegra para todos”, concluyó Mendoza.