Sello Editorial UT, se renueva en 2023: Estandarización y simplificación de procesos para publicar más fácil

Crédito: Suministradas / EL NUEVO DÍAFlorelia Vallejo Trujillo, nueva directora del Sello Editorial.
“Veo en cinco años un Sello Editorial reconocido como una marca seria, que publica obras, libros y artículos de calidad, al mismo nivel de las mejores universidades de Colombia”, anunció la directora Vallejo.
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Florelia Vallejo Trujillo es la nueva directora del Sello Editorial, de la Unidad de Publicaciones de la Vicerrectoría de Investigación-Creación-Innovación, Extensión y Proyección Social, quien asumió recientemente el reto de posicionar e impulsar el Sello Editorial UT, para convertirlo en la marca representativa de las publicaciones académicas de la Universidad del Tolima. Esta abogada experta y doctorada en propiedad intelectual (incluyendo derechos de autor), conversó sobre lo que viene en este 2023.

En primer lugar, una de las tareas es ordenar desde el Sello las publicaciones por áreas del conocimiento, por tipo de público, por temas especializados o generales tanto en libros como en revistas y dar cabida a otro tipo de publicaciones seriadas como gacetas, periódicos, separatas, series con periodicidad y productos específicos.

Según la profesora Vallejo Trujillo, un Sello Editorial para la Universidad del Tolima o para cualquier institución es muy importante por ser el encargado de recoger, canalizar, sistematizar y publicar la producción intelectual generada al interior de la institución por profesores, estudiantes y funcionarios, de manera ordenada para así evitar que se disperse o limite su alcance. 

También, porque la producción académica suele ser muy especializada y, por ello, poco atractiva para editoriales comerciales, de manera que si no existieran las editoriales universitarias, la divulgación del conocimiento científico en formato de libro, sería más limitada.

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Para el departamento del Tolima, que la Universidad pública más importante de la región tenga un Sello Editorial, es significativo porque aumenta índices de competitividad, y le permite convertirse en el escenario natural para la publicación y la comunicación científica del conocimiento que se genera tanto en la universidad como en la región.

“Nuestro país tiende a ser muy centralista y eso hace que en cierta medida lo regional pase a un segundo plano, que se vuelva casi invisible; por eso, un Sello Editorial como el de la Universidad del Tolima sirve para visibilizar los problemas regionales y las soluciones que desde la región damos a estos y otros problemas. Sirve para ubicarnos en el mapa. Para mostrarnos y para que nos veamos. Para que sepamos qué está pasando, qué soluciones tenemos, qué alternativas planteamos nosotros mismos. Y, además, hacerlo evidente para las demás regiones y para el país”, comentó la directora.

¿Quiénes pueden publicar? ¿Cómo publicar? Eso es algo que se encuentra en discusión y proceso de mejora al interior de la UT, porque actualmente el Sello solo publica resultados de investigación generados por los grupos de investigación adscritos a la Oficina de Investigaciones, es decir, la posibilidad de publicar bajo el Sello Editorial de la Universidad del Tolima es limitada. Para la publicación de libros se hacen convocatorias anuales, los seleccionados son financiados por la universidad. Adicionalmente, los profesores y funcionarios que tengan los recursos para autofinanciarse pueden hacerlo a través del Sello, sometiéndose a los procedimientos y cumpliendo con los estándares de calidad establecidos por el Sello para sus productos.

Precisamente, los estándares de exigencia son dos: revisión de antisimilitud, que se realiza con un software especializado y la evaluación por pares académicos que deben estar en el listado oficial del Minciencias, quienes lo hacen bajo el sistema de doble ciego. Lo cual quiere decir que quienes definen la publicación no son ni funcionarios ni profesores de la UT, sino los pares de Minciencias. Ellos no saben a quién están evaluando, al tiempo que los evaluados desconocen la identidad de los pares que revisan su producción intelectual. 

A través de esa evaluación, se busca que los libros cumplan con los estándares de calidad exigidos para las publicaciones científicas en Colombia.

“Claro que esperamos abrirnos hacia otro tipo de publicaciones, poder apoyar más de cerca la producción de otro tipo de libros y textos. Como por ejemplo aquellos llamados productos de investigación-creación, que son los productos que desarrollan los profesores y grupos de investigación de las artes, se llaman así porque tienen un formato diferente y una forma de evaluación diferente. Por ahora nuestro sistema está diseñado solo para la publicación y comunicación de resultados de investigación clásicos, pero esperamos poder cambiar eso en un futuro cercano.”, indicó Vallejo.

En cuanto a las revistas, actualmente se cuenta con una amplia oferta de las mismas y en ellas sí pueden publicar todas las personas interesadas. Incluso la regla es que la mayoría de las personas que publiquen en las revistas deben ser externas a la Universidad, porque este es uno de los requisitos de indexación exigidos por Minciencias.

Los retos del Sello Editorial UT, ahora desde una nueva Vicerrectoría de Investigación, pasan por acciones como crear la política editorial, la actualización de todos los procedimientos y de los formatos, abrir nuevas posibilidades de publicación y no solo en cuanto a los formatos de libro sino también respecto de las personas que puedan hacerlo.

“A esto le apuesta la universidad con el señor rector, Ómar Mejía, y el vicerrector de Investigaciones, John Méndez. Por eso es que la Oficina de Investigaciones mutó hacia una Vicerrectoría con dos direcciones: una de Fomento a la Investigación-Creación e Innovación y la otra de Extensión y Proyección Social. De la mano de ese cambio administrativo se busca fortalecer la Unidad de Publicaciones, generar nuevas dinámicas que proporcionen mejores resultados, que visibilicen el Sello Editorial y lo posicionen tanto en la ciudad como en la región; no solo a través de las publicaciones, sino, también, llegando a diferentes municipios con nuestras publicaciones. Otro de nuestros objetivos es institucionalizar una campaña de donación de libros para que nuestras publicaciones lleguen a los municipios con poco acceso a internet y cuya fuente principal de conocimiento sigue siendo los libros impresos; queremos llevar el conocimiento a través del Sello a la región.”, comentó.

En un año o dos, la directora espera contar con un Sello Editorial fortalecido, con identidad propia, con reglas de publicación claras, de acceso público a través de su página web para que cualquier persona de la UT y de fuera de ella pueda saber con exactitud qué hacer para publicar, cuáles son los requisitos, a dónde dirigirse, y con un equipo de profesionales capaces y comprometidos con la publicación de producción académica de alta calidad.

 

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